Hoy esta cumpliendo 52 años la popular actriz cubana Amarilys Núñez

Redacción

Hoy esta cumpliendo 52 años la popular actriz cubana Amarilys Núñez

Hoy está de cumpleaños la popular actriz cubana Amarilys Núñez, uno de los rostros imprescindibles de las telenovelas en Cuba, desde que apareciera por primera vez en Tierra Brava y que otros incluso la recuerdan de pequeña, cuando hacia el recordado programa infantil de Amigos y sus amiguitos… FELICIDADES!!!

Amarilys, sin embargo, dice que nació para el teatro, y en las tablas han sido protagonista de más de una veintena de puestas, desde Yerma, La verbena de la paloma, Las leandras, Bodas de Sangre, Electra Garrigó o su espectacular interpretación de Delirio Habanero.

Aunque muchos no lo saben, Amarilys es hija de la prestigiosa cantante lírica María Eugenia Barrios. Ella fue la que desde pequeña le sembró quizás el bichito de la actuación, cuando logró participará siendo una niña en programa infantiles

Sus inicios en el arte no fueron en la actuación, sino en la danza, pues estudió ballet clásico y se graduó de nivel elemental. Luego se apartó del medio artístico hasta 1990, cuando es aceptada en el Instituto Superior de Arte y se graduó como actriz en 1995.

Su primer papel importante en la televisión fue en la telenovela Tierra Brava, en el año 1996, donde encarnaba a la hermana de uno de sus protagonistas, Lucio Contreras. Después vinieron otras que aún siguen marcadas en el recuerdo de millones de cubanos como El eco de las piedras, Violetas de agua, Destino prohibido, Al compñas del son y su inolvidable Adelafa en ¡Oh!, La Habana; demostrando siempre que cuando se conoce el oficio de actriz no importa que el papel no sea el mejor del mundo para hacerlo brillar.

Amarilys a veces prefiere pasar inadvertida. Asegura ser tímida, “aunque no lo parezca”, como ella misma ha confesado, y solo cuando está junto a un circulo de amigos es que se siente libre.

No reparar en Amarilys Núñez resulta un imposible. Aunque en el casting no ocupe un lugar protagónico, su presencia y una energía soterrada que destila por los bellos ojos obligan a mirarla y a disfrutarla.