La búsqueda de los 10 cubanos desaparecidos tras el naufragio de una improvisada embarcación frente a las costas de Florida en la noche del pasado miércoles fue finalmente suspendida por la Guardia Costera de Estados Unidos (USCG) en la noche de este sábado.
Los guardacostas estadounidenses concluyeron con el operativo de búsqueda a las 8:00 p.m., después de que se realizara un fallido patrullaje aéreo y marítimo de una duración de 55 horas ininterrumpidas, pues no se encontró rastro alguno de los náufragos cubanos. La entidad declaró que permanece en espera de nuevas informaciones y órdenes sobre el caso.
El comandante de USCG en el sector de Key West, Capitán Adam Chamie, aseguró en un comunicado oficial que se analizaron cautelosamente todos los hechos antes de declarar la suspensión de la búsqueda, por lo que mandan su más sentido pésame a los allegados de las víctimas.
Las esperanzas por hallar más sobrevivientes del siniestro se acaban de esfumar con esta noticia, por lo que la cifra de fallecidos ascendió formalmente a 12.
Los rescatados fueron 8 cubanos (6 hombres y 2 mujeres), quienes permanecían flotando y pidiendo ayuda en el medio del mar hasta que una patrulla aérea de la Guardia Costera los divisó al mediodía del pasado jueves (unas 12 horas después). Se hallaron 2 cuerpos en la primera búsqueda.
Esta constituye la segunda travesía marítima desde Cuba hasta Estados Unidos que finaliza con fallecimientos en la misma semana. Activos de las Guardia Costera interceptaron a un grupo de 11 tripulantes cubanos el pasado sábado 22 de mayo en las cercanías de Alligator Reef Light, en Islamorada, y uno de ellos llegó muerto.
La embarcación volcada llevaba a 20 migrantes que habían zarpado del puerto de Mariel el pasado domingo y el operativo de rescate y rastreo comenzó a la 1:00 p.m. del jueves.
La zona ha sido peinada intensamente durante los últimos tres días por la Guardia Costera, la Marina de Estados Unidos, el Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP), dotaciones de la Fuerza Aérea y la Comisión de Pesca y Vida Silvestre de Florida y tripulaciones de agencias locales, a decir del oficial Chamie.
La pesquisa sumó en total más de 123 horas y cubrió alrededor de 8.864 millas cuadradas, equivalente a las dimensiones del estado de New Hampshire, y para ello los equipos de rescate pusieron en práctica múltiples patrones de búsqueda.
Los nombres de los sobrevivientes ha sido un reclamo desesperado por parte de familiares en Cuba y Miami.
Entidades federales no han divulgado la identidad de los balseros detenidos, quienes se encuentran bajo su custodia, con el argumento de respeto a la política de privacidad. Una vez cumplidos los trámites de la Oficina Forense serán revelados los nombres de los muertos, siguiendo el procedimiento de reclamación por parte de los familiares.
El cuerpo de la Guardia Costera sugirió a las personas con sospechas de que sus parientes pudieran estar implicados en el accidente que entren en contacto con la oficina congresional en su distrito, en aras de demandar información a las autoridades federales.
Los ocho sobrevivientes pueden acogerse a los trámites para ser procesados como refugiados en Estados Unidos, para lo que deben alegar “miedo creíble” de sufrir perjuicios por una posible deportación.
El fenómeno de los balseros se ha intensificado en este año fiscal, comenzado en octubre pasado, y las autoridades de ambos países lamentan los pronósticos de un crecimiento de las cifras en vísperas de la temporada de verano.
Durante el año fiscal de 2021 han habido 298 intervenciones a cubanos, la cifra de los interceptados en 2020 (49) sextuplicada.
