La Virgen del Camino, una escultura que bendice a los habaneros

Redacción

La Virgen del Camino, una escultura que bendice a los habaneros

En el capitalino municipio de San Miguel del Padrón se encuentra una estatua a la que no pocos habaneros veneran: La Virgen del Camino. Las personas se acercan a ella, le hablan, le colocan flores y hasta le hacen promesas, ya que se dice que es muy poderosa y a su vez protectora.

El parque en el que se encuentra la Virgen del Camino está ubicado en la rotonda que conecta la Calzada de San Miguel, la de Luyanó y la Carretera Central.

En la Glorieta del parque se encuentra la Virgen, la cual fue creada por la escultora cubana Rita Longa Aróstegui. En sus manos, sostiene una rosa náutica y su mirada la hace parecer como si llegara a perderse en la ciudad, como alguien que busca un destino.

Dieciséis colosales columnas sostienen la parte techada de la glorieta, inamovible a pesar de las décadas.

Una curiosa historia cuenta que la célebre Rita Longa halló inspiración en una virgen de madera que sobrevivió a las llamas en una cafetería cercana, ubicada donde actualmente existe una agencia de venta de boletos para viajar en autobús al interior de la Isla.

En el bronce utilizado por la artista para su escultura se fundieron monedas cubanas de la época. Comenzó una época en que muchos deseaban colaborar con la obra colosal y ofrecieron monedas, medallas, joyas y otros materiales de bronce, que tras fundirse posibilitaron a la artista moldear una más de sus 40 esculturas, pero con un lugar especial entre las más queridas.

El día de su inauguración, Rita Longa dejó caer unas monedas en las aguas de la fuente pidiendo la buena suerte a La Virgen del Camino y desde ese momento los creyentes comenzaron a arrojar a sus pies, anillos, medallas y pulsos de oro y plata.

En su conjunto mide 200 cm de alto y 180 de ancho. Se dice que, cuando Rita Longo comenzó a trabajar en esta obra en 1945, solicitó la intervención del Tribunal de ritos en Roma para que la devoción de los creyentes hacia la virgen fuese declarada legítima.

Múltiples leyendas urbanas se han entretejido en torno a la angelical figura.

No pocos artistas del mundo han representado vírgenes en diferentes épocas, por lo que la petición fue concedida e incluso contó la bendición del Cardenal Arteaga, quien la consagró como “la madre protectora del viajero peregrino”, entendiendo que esta era una de las muchas interpretaciones de la Vírgen María.

Tanto se llegó a recaudar con las ofrendas que se realizaban que el ayuntamiento llego a abrir una cuenta de la Virgen del Camino en la que diariamente se ingresaban unos 60 pesos de la recolecta.

Actualmente las ofrendas ya no son las mismas, pero nunca faltan las flores entre sus brazos.