Cuba inicia del ‘Día Cero’ de la unificación monetaria y le dice adiós para siempre al CUC

Redacción

Cuba inicia del 'Día Cero' de la unificación monetaria y le dice adiós para siempre al CUC

Cuba entra este viernes 1ro de enero de 2021 en el complicado camino de la unificación de sus dos monedas -el peso cubano CUP y el convertible CUC, que desaparecerá de la circulación dentro de seis meses-, en el que se considera el “Día Cero” de una reforma monetaria y cambiaria, en la más compleja de las transformaciones económicas emprendidas de la isla en las últimas tres décadas.

“Todo mundo está preocupado, ¡el cubano vive del susto!”, dice Yusbel Pozo, un cuentapropista de 36 años que como el resto de los que viven en la mayor de las Antillas está a la expectativa de la pronosticada inflación en los precios.

Los cubanos se levantan tras la cena de Noche Vieja con el aumento salarial más grande hecho desde 1959, pero con resaca por sustanciales alzas de precios, que incluyen a la canasta básica y electricidad, así como reducción de subsidios.

Precisamente, el alza de las tarifas de la electricidad hasta el 500 por ciento respecto a los precios actuales provocó un malestar general entre la población cubana, que volcó sus quejas y críticas en comentarios a nivel de calle y en las redes sociales, una vía cada vez más usada por los cubanos como espacio de opinión pública.

A ello el Gobierno cubano respondió esta semana con el anuncio de una modificación a la baja para todos los tramos de consumo en los que se divide la tarifa eléctrica que se aplicarán desde inicios de 2020.

Aún así para Yusbel Pozo “el futuro es incierto”. “No sabemos lo que va a pasar. La corriente sube cinco veces, suben los alimentos”, dice desconcertado. Las autoridades anticiparon un alza generalizada de precios de un 160% y esperan que los negocios privados los aumenten 300% o más para poder sobrevivir.

A partir de esta fecha desaparecerá el peso cubano convertible CUC -moneda artificial paritaria con el dólar puesta en circulación en 1994- y el peso cubano CUP, la moneda única con denominación legal para todas las operaciones, se devalúa frente al dólar con una tasa de cambio fija de 1 USD por 24 CUP.

Hasta ahora la tasa de cambio oficial era de un CUC por 25 CUP para la población y el sector privado, pero imponía una fuerte devaluación de 1 CUC=1 CUP para las empresas estatales.

Además, Cuba cuenta con una red de tiendas en las que sólo se puede comprar con cuentas en MLC (monedas libremente convertibles), que se cargan con dólares generalmente depositados fuera del país.

En estos establecimientos se venden una buena cantidad de productos de consumo cotidiano para los hogares que no están contemplados en la libreta de racionamiento, con la que los cubanos se abastecen de alimentos básicos como arroz, azúcar, huevo, pollo, aceite y otros. Sin embargo, los dólares para esas cuentas no se pueden adquirir ni en bancos o casas de cambio dentro de Cuba.

El gobierno ha pensado detenidamente todos los movimientos del tablero, pero en este ajedrez no se contempla todo lo que los hogares obtienen a través del mercado informal y ahí no hay control de precios.

“Mis hijos no pueden comer caramelos ni galleticas en este día de Reyes Magos. Todo es en puro dólar”, dice con pena Ariadna Rodríguez, de 28 años y trabajadora de un comedor público, que no tiene la suerte de estar entre el 50% de cubanos que recibe divisas de familiares o amigos del exterior. “Ojalá qué se den cuenta que nos están machucando mucho”, dice mientras camina por la calle Amargura, en la turística zona de La Habana Vieja.