12 balseros cubanos son repatriados a Cuba desde Estados Unidos, en medio de un éxodo que no para de crecer

Laritza Sánchez

¿Podría estar Cuba al borde de una ola migratoria como la del Mariel o la de 1994?

La Guardia Costera de los Estados Unidos interceptó en los Cayos de la Florida una improvisada embarcación con una docena de migrantes cubanos a bordo en la mañana del miércoles.

Esta travesía constituye el 4to intento reconocido de migración cubana hacia las costas de Estados Unidos en un semana. Para un total de 19 personas, dos grupos distintos de migrantes desembarcaron entre el viernes y sábado en la ciudad de Marathon, en los Cayos Medios.

El mismo sábado fue detenido un bote con 14 tripulantes que se encontraban navegando a unas 35 millas al noroeste de Cayo Hueso.

La embarcación de ayer miércoles fue encontrada a unas 3 millas a Cayo Largo a las 7:30 a.m., de acuerdo con el testimonio cedido por el portavoz de la Florida Fish and Wildlife Conservation Commission, Bobby Dube, entidad que también participó en la operación.

Las autoridades norteamericanas han notado el significativo aumento de las travesías migratorias desde Cuba hasta su país sucedidas en los últimos meses, las que fueron realizadas comúnmente sobre embarcaciones rústicas e inapropiadas para cualquier tipo de navegación.

En lo que va de año fiscal 2021 (contado desde el 1ro de octubre de 2020) la Guardia Costera estadounidense ha interceptado a casi 180 migrantes que viajaban por vía marítima, una cifra alarmante cuando se toma en cuenta que en todo el año fiscal 2020 solo se detuvo a 49.

Los números oficiales de migración ilegal cubana por mar hacia Estados Unidos disminuyeron notablemente cuando la administración de Barack Obama suprimió el efecto de la política de “pies secos, pies mojados”, lo que canceló el derecho de los migrantes cubanos de residir legalmente en su territorio (hasta solicitar la residencia permanente al año y un día) con solo poner pie en su suelo. Esa constituyó una se las últimas medidas de política exterior del expresidente, con vigor a inicios de 2017.

El anuncio de la puesta en práctica de esa decisión desató una oleada de migrantes ilegales que intentaron llegar a sus costas en los meses previos a la oficialización de la normativa, por lo que el año fiscal 2017 contabilizó la detención de 5.396 personas en el Estrecho de la Florida.

Ahora todos los migrantes cubanos que lleguen a territorio estadounidense son devueltos a la isla sin contemplación alguna.

La crisis económica por la que atraviesa ha isla ha desencadenado un alza en las últimas cifras migratorias de cubanos hacia Estados Unidos, o hacia un tercer país con el objetivo de llegar a la nación norteamericana.

El director del Instituto de Investigación Cubana de la Florida International University, Jorge Duany, comentó que la isla se encuentra en medio de su peor crisis financiera desde el Período Especial, y las condiciones de vida están decayendo considerablemente incluso más desde que llegó la pandemia del coronavirus, y las sanciones impuestas por el gobierno de Donald Trump solo han empeorado el panorama.

Entre las medidas punitivas se encuentran la prohibición a ciudadanos estadounidenses de importar tabacos y ron cubanos, así como alojarse en hoteles que pertenecen a conglomerados militares del Gobierno, que son todos los que radican en la isla, lo que supuso un duro golpe a la economía nacional.

Otro asunto que influye en el creciente flujo migratorio de cubanos constituye la paralización de los trámites consulares de Estados Unidos en la oficina de La Habana, por lo que los isleños que quieran viajar o emigrar deben pasar primero por un tercer país. Además las solicitudes de visado que ya se encuentran en el sistema han sufrido un retraso de unas 100,000 peticiones por este mismo motivo.

La represión gubernamental contra la oposición es también un factor que muchos han tenido en cuenta.

Cubanos escogen diversas vías para llegar a Estados Unidos, siendo la ruta marítima solo una de ellas. Además, pueden llegar a algún país sudamericano y luego cruzar una frontera centroamericana tras otra. En ese caso, hay alrededor de 170,000 migrantes varados en la frontera entre Estados Unidos y México.