Aldabó, la marca de ron y licores cubanos que llegó a competir con las mejores del mundo antes de 1959

Andrés Parra

Aldabó, la marca de ron y licores cubanos que llegó a competir con las mejores del mundo antes de 1959

Una isla sembrada de caña, con la industria azucarera como elemento distintivo, hizo que la producción de rones y licores se convirtiera rápidamente en uno de sus atractivos principales. Cuba es el sabor tropical de las bebidas alcohólicas que la han hecho mundialmente conocida y es, por ende, la sucesión de nombres que, con mayor o menor fortuna, han trabajado para la internacionalización de la industria ronera y licorista cubana.

Bacardí y Arrechabala son los nombres más preeminentes de esa historia, los apellidos más citados para hacer referencia a las bebidas alcohólicas producidas en Cuba. Pero, como es lógico suponer, sus fábricas no fueron las únicas que alcanzaron renombre.

Aldabó, además de dar nombre a un conocido reparto de La Habana, es otro de esos apellidos preeminentes de la historia del ron cubano. Fundada en 1885, la fábrica de licores logró hacerse de cierta notoriedad en la competitiva industria de derivados alcohólicos de la caña azúcar.

Antigua etiqueta de la crema de ron Aldabó

Tal es así que, una publicación de 1912, escribió: “El Sr. Enrique Aldabó fue un genial industrial cubano a quien se deben en gran parte los admirables progresos alcanzados por la industria licorista en nuestro país. Los productos de su fábrica han obtenido las primeras recompensas en numerosos certámenes internacionales y gozan de gran renombre mundial…”

La historia de los licores Aldabó estuvo también vinculada a una edificación de la calle Monte #991 entre Pila y Castillo, en la que todavía pueden leerse las letras E. Aldabó. Lo que indica que la destilería y fábrica de licores fue mudada a dicho emplazamiento, cerca de la muy concurrida Plaza de Cuatro Caminos.

La producción de Aldabó incluía varios de los licores más renombrados, algunos todavía en fabricación, entre los que vale citar el Bombón-Crema, el Vino Piña, el Triple-Sec Aldabó, la Orangina y cremas al licor como las de Piña, Anón, Café y Cacao.

Etiqueta de a Crema de Café Aldabó

Su “Triple-Sec Aldabó”, confeccionado a base de naranja, superaba al producto similar francés. El “Bombón-Crema”, a base de cacao, era otro de los licores que mayor fama le dieron a su producción, siendo éste y el El Triple-Sec los que posteriormente tuvieron más ventas en América y en Europa. También el “

Botella de extracto de absenta Aldabó

” y el “Vino Piña” eran productos que podían competir con los más renombrados licores similares de fabricación francesa.

El “Vino Piña” no tenía competencia. Elaborado con el jugo de la reina de las frutas, extraído por presión, fermentado, decantado, clarificado y su posterior envejecimiento realizado según procedimientos exclusivos de este gran licorista cubano.

A esos licores, aún puedo agregar: la “Orangina”, derivado de la naranja; la “Crema Anón” y “Crema Piña”, a base de las frutas de su nombre; la “Guayabina” o “Licor Patria”, derivado de la guayaba; las “Crema de Café” y “Crema de Cacao”, la “Crema habanera”, licor sin rival; el “Triple Anís” de gran consumo, y el “Champagne de plátano”, considerada deliciosa y superior a la sidra.

Destilería y Fábrica de Licores Aldabó, en la calle Monte, de La Habana

Otra de las especialidades de Aldabó fue el “Ron exquisito” que obtenía directamente del jugo de la caña de azúcar, no utilizando aditamento alguno. Como era su costumbre, fermentado, destilado y envejecido según sus procedimientos exclusivos, produciendo un ron de insuperables propiedades.

La excelencia de sus producciones le permitió alcanzar notable prestigio, ganar premios y, haciendo gala del carácter altanero que caracteriza a los cubanos, lanzar varios retos a licoristas del mundo para que presentaran productos que se asemejaran en calidad a alguno de los licores Aldabó.

Tiempo después la destilería y fábrica de licores pasó a ser parte de la Compañía Licorera de Cuba S. A., que tenía su sede en Basarrate #102 esquina San Rafael.

 

Todos los componentes utilizados en su fábrica eran productos cubanos, lo que sin dudas contribuyó en gran parte a sus éxitos. El azúcar cubano y el alcohol que por destilación se obtiene del jugo de la caña, son determinantes para la fabricación de licores. Y respecto a esto, sabemos que nuestro azúcar es superior, al igual que nuestras frutas que servían de base a los licores de Aldabó y que eran seleccionadas entre las mejores del país.

Los licores Aldabó son parte de la rica historia que acompaña la excelencia del ron cubano que, a pesar de su internacionalización, ha dejado de lado la producción a gran escala de licores. Aunque, como justo homenaje, la Empresa de Bebidas y Licores, ubicada en la calle Santa Catalina, produce a día de hoy una Crema de Ron que lleva su nombre, sin dudas un ejemplo de la calidad y prestancia que acompañó, durante toda su historia, a la destilería de Enrique Aldabó.