Recientemente, ha sido reportado el hallazgo de un ataúd abandonado en las orillas de un río en la provincia de Camagüey, en Cuba. De acuerdo con testimonios, en su interior se encontraba el cadáver de un niño. Las imágenes del hallazgo se han hecho virales en las redes sociales, mostrando la presencia de las autoridades y peritos en el lugar.
Según reportes preliminares, el ataúd habría sido desenterrado de un cementerio en Jimaguayú, municipio de la provincia camagüeyana. Algunos usuarios han especulado que el niño podría haber sido utilizado para fines rituales. Este tipo de denuncias se están volviendo cada vez más frecuentes en Cuba, y es lamentable que los crímenes contra los más vulnerables de nuestra sociedad estén en aumento.
En otro incidente similar ocurrido en marzo pasado, una estudiante de la EIDE de Villa Clara dio a luz a un bebé en una escuela de deportes y luego lo lanzó desde el segundo piso, causándole fracturas craneales. Aunque el bebé fue encontrado con vida, no logró sobrevivir y falleció poco después. La comunidad ha condenado el acto y se espera que se haga justicia por el pequeño angelito.
Es desgarrador ver cómo la falta de humanidad y la violencia están ganando terreno en nuestra sociedad. En vez de estar vigilando la oposición, las autoridades deberían centrarse en proteger a los más vulnerables y garantizar la seguridad de sus ciudadanos. Todos debemos unirnos para denunciar estos crímenes y hacer todo lo posible para evitar que se repitan en el futuro.
