Enfermero cubano es brutalmente asesinado en Colombia

Redacción

Un enfermero cubano ha sido asesinado brutalmente en la ciudad de Bogotá, Colombia, según informes de los medios locales. La víctima ha sido identificada como Orlando Chaviano Hernández, y su muerte ha causado una gran conmoción en la localidad de Kennedy de la capital colombiana.

Las autoridades del país han revelado que el enfermero cubano fue encontrado amordazado, atado de manos y pies dentro de un apartamento, después de que varios oficiales de la Policía atendieran una llamada. Los oficiales tuvieron que pedir la asistencia del Cuerpo de Bomberos de Bogotá para abrir la puerta del apartamento.

Al ingresar al lugar, los oficiales encontraron el cuerpo sin vida del extranjero que había sido reportado como desaparecido el 20 de abril. Su cuerpo estaba sobre una cama en avanzado estado de descomposición. El enfermero cubano tenía 54 años de edad, y poseía documentación cubana y colombiana.

Las autoridades manejan como móvil del asesinato el hurto, pero se investiga si hubo otras motivaciones. Los asesinos le amputaron a Orlando Chaviano Hernández la primera falange del dedo índice de la mano derecha y se descubrió que le habían robado dinero en dólares que estaban dentro de una caja fuerte.

Las autoridades también están investigando la probabilidad de que el crimen estuviera motivado por el odio y la homofobia, ya que aparentemente la víctima era miembro de la comunidad LGBTIQ+. El enfermero cubano trabajaba en la Secretaría Distrital de Salud.

Según la Secretaría de Salud, Orlando Chaviano Hernández estaba trabajando como enfermero en el país desde enero de 2022, en el marco del contrato de Tuberculosis y Lepra celebrado entre la Subred Integrada de Servicios de Salud E.S.E y la Secretaría Distrital de Salud.

Este terrible suceso ha dejado consternada a la comunidad LGBTIQ+ de Bogotá, así como a la comunidad médica de la ciudad. La muerte de Orlando Chaviano Hernández no solo es una pérdida trágica para su familia, amigos y colegas, sino que también es una pérdida para la sociedad en general, ya que se trataba de un profesional de la salud comprometido y dedicado.