En la provincia de Matanzas, la Central Termoeléctrica (CTE) Antonio Guiteras atrajo la atención el domingo pasado al intentar reactivarse tras 72 horas de reparaciones intensivas. Sin embargo, el intento resultó en vano, ya que la planta no pudo mantenerse operativa.
El periodista oficialista José Miguel Solís, en un giro emocional, celebró inicialmente la entrada en servicio de la CTE a las 9 de la noche, anunciando un aumento en su potencia hasta 110 MW. Pero la euforia fue de corta duración, ya que una hora después, el mismo Solís informó que el proceso de sincronización se interrumpió y se estaba investigando nuevas complicaciones.
En sus propias palabras: “#cteantonioguiteras. Se investiga dificultades en la automática de la planta para volver a sincronizar”, compartió en Facebook. Estas declaraciones sugieren que se prevé un nuevo intento de sincronización en un futuro cercano.
La CTE Guiteras había sido desconectada del Sistema Electroenergético Nacional (SEN) el jueves anterior para abordar varios problemas técnicos, incluido un alto consumo de agua. Rubén Campos Olmo, director general de la unidad con más de tres décadas de operación, había comunicado a la prensa oficialista que el mantenimiento incluía tareas como el lavado de los calentadores de aire regenerativos, inspecciones en el punto rojo y el interior de la caldera, y trabajos en más de 20 válvulas, además de pruebas hidráulicas e hidroneumáticas.
A pesar de las medidas tomadas, la sincronización fallida revela la complejidad de los desafíos técnicos a los que se enfrenta la CTE Antonio Guiteras. Según Campos, el objetivo de estas acciones correctivas es brindar mayor estabilidad a la planta en los meses por venir y mantener su potencia por encima de los 260 megavatios.
José Miguel Solís también había destacado que la central térmica había experimentado un inusual y alto consumo de agua en días recientes, llegando a superar los 40 y 50 metros cúbicos por hora. Este episodio subraya la necesidad urgente de abordar problemas de eficiencia y consumo en las instalaciones energéticas para garantizar un suministro constante y confiable.