Manuel Marrero celebra el Día Internacional del Café en medio de la escasez en Cuba

Redacción

El pasado 1 de octubre, el Primer Ministro de Cuba, Manuel Marrero, compartió un mensaje en sus redes sociales para celebrar el Día Internacional del Café. En su publicación, Marrero elogió al café como una de las bebidas más consumidas y populares en el mundo, además de destacar la importancia de promover prácticas cafeteras sostenibles. Sin embargo, esta celebración se ha convertido en una burla para los cubanos que han enfrentado la escasez de café durante meses.

La ausencia de café en los hogares cubanos ha generado gran insatisfacción entre la población, ya que esta bebida es una parte importante de la cultura cubana. Durante varios meses, los cubanos han tenido dificultades para encontrar café en las bodegas y tiendas locales.

En Holguín, la situación es preocupante, ya que las torrefactoras han dejado de producir café molido desde hace cuatro meses debido a las limitaciones en la importación de café en grano. Esta falta de café ha afectado no solo a los consumidores, sino también a los trabajadores de la industria cafetera en la región.

Sancti Spíritus no es una excepción, ya que desde el mes de mayo, los hogares no han recibido café, y las autoridades locales no han dado una fecha precisa para reanudar la producción. Esta incertidumbre ha dejado a los cubanos sin una fuente confiable de café, lo que ha generado frustración en la población.

En la capital cubana, La Habana, la escasez de café se ha extendido por más de tres meses. Aunque el Ministerio de Comercio Interior emitió un comunicado asegurando que “ningún producto de la canasta familiar normada ha sido eliminado”, los retrasos en la distribución han dejado a los habitantes sin acceso regular al café.

Esta situación plantea interrogantes sobre la gestión de recursos y la distribución de productos básicos en Cuba. A pesar de las dificultades económicas y las restricciones en el comercio internacional, la falta de café ha impactado significativamente en la calidad de vida de los cubanos y ha generado frustración en medio de la celebración del Día Internacional del Café.