El Paseo Marítimo Flotante de la Bahía de La Habana, una obra inaugurada hace menos de una década con el propósito de ofrecer un espacio de esparcimiento a los visitantes, se encuentra hoy en un estado de deterioro preocupante. Un reciente video difundido por el portal independiente CubaNet revela la gravedad de la situación, mostrando rampas de acceso donde faltan numerosos tablones, víctimas tanto del vandalismo como de la falta de un plan de mantenimiento adecuado por parte del gobierno.
Este emblemático paseo, que en su momento fue motivo de orgullo y admiración, ya daba muestras de desgaste en el año 2016, como lo evidencian fotografías capturadas por CiberCuba. La situación actual plantea serios riesgos para quienes se aventuran a recorrerlo, poniendo en evidencia la negligencia en su conservación.
Orlando Inclán, arquitecto y uno de los creadores de esta estructura, ofreció en 2019 una explicación sobre los daños observados en el paseo en una entrevista para el semanario Tribuna de La Habana. Según Inclán, parte del problema radica en la calidad insuficiente del primer lote de tablones utilizados para su construcción, aunque un segundo lote cumplió con los estándares requeridos. Además, señaló la influencia negativa de algunos visitantes en el deterioro de la estructura.
El arquitecto también reconoció la ausencia de un plan de mantenimiento específico para el Paseo Marítimo Flotante, a pesar de la existencia de una cultura de conservación promovida por la Oficina del Historiador para otros edificios históricos de la ciudad. Esta falta de atención y cuidado ha llevado a que, tras casi cinco años de uso intensivo, la obra requiera urgentemente de reparaciones para evitar un mayor deterioro.
Ubicado en La Habana Vieja, al inicio de la Alameda de Paula, el Paseo Marítimo Flotante fue diseñado inspirándose en un antiguo espigón que se encontraba en el mismo lugar hace más de dos siglos, junto al Antiguo Almacén del Tabaco y la Madera. Su construcción, realizada con piezas de madera aglomeradas con resina, permite su desmontaje y traslado a otros puntos marítimos, ofreciendo una solución flexible y adaptable a diferentes entornos.