El legado de la célebre actriz italiana Gina Lollobrigida, una de las figuras más destacadas del cine mundial, será subastado el próximo 28 de mayo en Génova, Italia. Entre los objetos más llamativos se encuentra un reloj de lujo que le regaló el líder cubano Fidel Castro.
A finales de los setenta, Gina Lollobrigida visitó Cuba en calidad de reportera gráfica. Durante su estancia en la isla, conoció a Fidel Castro, quien quedó impresionado por la actriz. Como muestra de su admiración, Castro le regaló un reloj de pulsera digital de la marca Seiko, hecho de titanio. Este reloj, aún en perfectas condiciones, tiene la inscripción “Para Gina con admiración”, un testimonio de la singular conexión entre la actriz y el mandatario.
Además del reloj, la subasta incluirá otros objetos significativos que pertenecieron a Lollobrigida. Entre ellos destaca la cámara fotográfica que utilizaba para capturar imágenes de personalidades como Paul Newman, Salvador Dalí y Henry Kissinger. Fue con esta misma cámara que retrató a Fidel Castro durante una entrevista en Cuba, momento que fortaleció su vínculo con el líder revolucionario.
La casa de subastas Wannenes será la encargada de llevar a cabo la venta de aproximadamente 400 objetos pertenecientes a la actriz. Estos artículos, que estarán disponibles para el público, provienen de su residencia en la romana Appia Antica, donde guardaba los “tesoros” acumulados a lo largo de su extensa y exitosa carrera.
Gina Lollobrigida no solo destacó por su impresionante belleza, sino también por su versatilidad artística. Su carrera abarcó desde el cine hasta la fotografía, la música y la escultura. Esta diversidad se reflejará en la exposición previa a la subasta, que tendrá lugar del 25 al 27 de mayo en la Villa Carrega Cataldi, en Génova.
Sin embargo, el evento de subasta también está marcado por disputas legales en torno al legado de Lollobrigida. Estas disputas involucran a su hijo, Milko Skofic, y a su exasistente, Andrea Piazzola. Piazzola fue condenado por robar parte del patrimonio de la actriz, añadiendo un componente controversial al legado de la estrella italiana.
Desde sus inicios en 1946 hasta sus papeles más icónicos junto a renombrados directores como Pietro Germi, Mario Monicelli, Vittorio De Sica y Mario Soldati, Gina Lollobrigida dejó una huella imborrable en el mundo del entretenimiento. Su fama alcanzó su punto máximo durante las décadas de los cincuenta y sesenta, con películas emblemáticas como “Beat the Devil” (1953) y “Trapeze” (1956).
La subasta de sus pertenencias no solo es una oportunidad para los admiradores de adquirir un pedazo de la historia de esta icónica actriz, sino también para recordar y celebrar la vida y carrera de una de las estrellas más brillantes del cine italiano.