¡La Verdad Detrás de la Desaparición de Lucila Granados! ¿Qué Pasó con la Azucena de ‘Los Pequeños Fugitivos’?

Redacción

Lucila Granados es parte de un grupo de actores que marcaron una época en la televisión cubana y luego desaparecieron sin dejar rastro. Al igual que otros actores como Liety Chaviano, Maribel Reyes, María Karla Fernández y Sahily Cabezas, Granados ganó reconocimiento en su momento, solo para desvanecerse de la vida pública debido a la emigración y otros motivos. Estos actores dejaron una huella en la memoria de los televidentes cubanos, pero sus caminos se bifurcaron lejos de los reflectores.

Recientemente, la actriz Massiel Dueñas rescató la figura de Granados mediante un video en su canal de YouTube. En este video, Dueñas repasa la carrera de Granados y conversa con ella sobre su vida en los años recientes, un período en el que desapareció de las pantallas cubanas. Esta entrevista proporciona una ventana fascinante hacia la vida de una actriz cuyo talento y carisma dejaron una marca imborrable en la televisión de su país natal.

Nacida el 31 de octubre de 1970, Lucila Granados se sumergió en el mundo de la actuación a una edad temprana. Participó en un taller de actuación dirigido por la profesora Esperanza Millet, un semillero de talento del cual surgieron otros actores destacados como Orlando Fundichely, Humberto Miranda, Sergio Pons y Tony Cortés. Este taller fue el punto de partida para una carrera prometedora en la televisión cubana.

Uno de los primeros papeles de Granados en la televisión fue en el programa “Nuestros hijos” a mediados de los 80. Más tarde, apareció en “Así era entonces”, un programa humorístico que transportaba a los espectadores a situaciones ocurridas en los años 50. Estos programas fueron solo el inicio de una trayectoria llena de personajes memorables y actuaciones destacadas.

Granados también formó parte del elenco de la serie de aventuras “El rey de la montaña” y coprotagonizó el programa infantil “Mundo mágico” junto a Yovalys González. Sin embargo, su gran oportunidad llegó con la telenovela “Las huérfanas de la Obra Pía”. En esta serie, la trama se centraba en jóvenes huérfanas en el siglo XIX que participaban en un sorteo para recibir una dote matrimonial o ingresar a un convento.

El papel que consolidó su fama fue el de Azucena en la segunda versión de “Los pequeños fugitivos”. Compartió escena con Jorge Luis Espinosa, quien interpretaba al desdichado Malvino Fortuna. Su actuación en esta serie la catapultó a la fama, y posteriormente participó en la telenovela “La cara oculta de la luna” y “Polvo en el viento”, sumando éxitos a su carrera.

Sin embargo, en 2009, Granados decidió cambiar de rumbo y se dedicó a la producción. Según cuenta Dueñas, escribió y produjo la serie “Desafíos” de manera independiente, una de las primeras en ser producidas así en Cuba. Esta serie, disponible en YouTube, relata la historia de una familia disfuncional que enfrenta múltiples problemas como machismo, homofobia, celos y violencia.

En una reveladora entrevista con Massiel Dueñas, Granados confesó que en 2010 se mudó a Estados Unidos gracias al Proceso de Reunificación Familiar, tras ser reclamada por su padre. Al principio, trabajó en cafeterías y restaurantes hasta que encontró una oportunidad en el programa “Caso cerrado” gracias a la actriz Dianelys Brito. Granados formó parte del equipo hasta que el programa dejó de emitirse en 2019.

Después de “Caso cerrado”, Granados trabajó en una agencia de envío de paquetería hacia Cuba y luego como productora de un programa presentado por las influencers cubanas Aly Sánchez y Camila Guiribitey. Además, ha participado en series disponibles en la plataforma de streaming Pronyr TV, que ofrece contenido creado por talento cubano y ha brindado oportunidades laborales a actores cubanos en Estados Unidos.

La historia de Lucila Granados es un testimonio de perseverancia y adaptación. Desde sus inicios como una talentosa actriz en la televisión cubana hasta su transición a productora y su vida en Estados Unidos, Granados ha demostrado una capacidad admirable para reinventarse y seguir adelante. Su carrera es un ejemplo inspirador de cómo enfrentar los desafíos y encontrar nuevas vías para el talento y la creatividad.