En un movimiento estratégico, el Comando Sur de Estados Unidos ha confirmado la llegada del submarino de ataque rápido USS Helena a la Bahía de Guantánamo. Según un comunicado publicado en la plataforma X, «el submarino de ataque rápido USS Helena se encuentra en la Bahía de Guantánamo, Cuba, como parte de una visita portuaria de rutina mientras transita por el área geográfica de responsabilidad del Comando Sur de EE. UU. mientras lleva a cabo su misión de seguridad marítima global y defensa nacional». El comunicado también añade que «la ubicación y el tránsito del buque estaban previamente planificados».
La presencia del USS Helena en la Bahía de Guantánamo se reporta al día siguiente de la llegada a Cuba del submarino ruso de propulsión nuclear Kazan. El USS Helena es conocido por sus capacidades avanzadas y su tecnología de vanguardia, lo que lo convierte en una pieza crucial en la defensa marítima de Estados Unidos. Su despliegue en Guantánamo reafirma la importancia estratégica de esta base en el contexto de las operaciones militares y de seguridad de Estados Unidos en la región.
El gobierno de Estados Unidos, en respuesta a la llegada de la flotilla rusa a Cuba, desplegó varios buques de guerra y un avión de reconocimiento submarino para rastrear su curso. El despliegue estadounidense incluyó dos destructores, el USS Truxtun y el USS Donald Cook, el Guardacostas Stone, y un avión de patrulla marítima Boeing P-8.
La flotilla de la Marina de Guerra de Rusia llegó a La Habana el mismo día. El gobierno cubano indicó que se trata de una visita programada, aunque ha generado gran expectación debido a su significado geopolítico. Entre las embarcaciones rusas se encuentran el buque petrolero de la flota Pashin, el remolcador de salvamento Nikolai Chiker (SB-131), la fragata «Almirante Gorshkov», y el submarino nuclear K-561 Kazan.
