Viajar a Cuba, y en especial transitar por las inmediaciones del Aeropuerto Internacional José Martí en La Habana, se ha vuelto cada vez más peligroso debido a una alarmante ola de asaltos. Estos robos, cometidos por grupos organizados de delincuentes, han generado una creciente preocupación entre cubanos, turistas y cubano-americanos. La combinación de carreteras en mal estado y la falta de una respuesta adecuada de las autoridades ha permitido que estos actos criminales sigan ocurriendo sin freno.
Uno de los casos más impactantes es el de Celeste, una mujer de 76 años que fue brutalmente asaltada al salir del aeropuerto. El ataque ocurrió cuando el vehículo de su familia tuvo que reducir la velocidad debido a los baches en la carretera. Seis hombres encapuchados, armados con palos y tubos, rodearon el coche y se llevaron todas sus pertenencias. Entre lo robado, estaba su pasaporte estadounidense, lo que la dejó en una situación vulnerable. “Lo que más me dolió fue perder mi pasaporte americano”, dijo Celeste en una entrevista con el diario independiente 14ymedio. Ahora, se enfrenta al difícil proceso de realizar trámites en la embajada de Estados Unidos para poder regresar a su hogar en Florida.
Zonas de Alto Riesgo: Un Problema Creciente
Lamentablemente, el caso de Celeste no es un incidente aislado. Las áreas cercanas a los aeropuertos en Cuba se han convertido en puntos rojos de inseguridad. La situación ha empeorado en los últimos meses, y muchas víctimas de estos robos se ven obligadas a acudir al consulado estadounidense en La Habana para solicitar nuevos documentos. La empleada de este consulado ha confirmado que reciben frecuentemente a personas que han sido víctimas de robos violentos en las inmediaciones de estos lugares.
Los delincuentes no discriminan al elegir a sus víctimas: tanto los turistas que viajan en vehículos de alquiler y taxis de lujo como los cubano-americanos que visitan a sus familias son objetivos frecuentes. Las carreteras deterioradas, sin vigilancia adecuada, se convierten en el escenario perfecto para que los ladrones ejecuten sus ataques con impunidad. Los conductores y viajeros se encuentran en una situación de extrema vulnerabilidad, especialmente en las horas nocturnas.
Relatos de Conductores: Advertencias en Redes Sociales
En las redes sociales, los conductores locales han comenzado a compartir sus propias experiencias y a advertir a otros sobre los tramos más peligrosos. Dainier González, un chofer que participa en un grupo de Facebook sobre accidentes de tránsito, relató cómo un grupo de asaltantes abrió el maletero de su coche mientras cruzaba un bache en San Miguel del Padrón. Otros internautas han compartido incidentes similares en áreas cercanas al aeropuerto de Ciego de Ávila.
El foco de mayor preocupación sigue siendo la avenida Boyeros, en las inmediaciones de la Terminal 3 del aeropuerto José Martí. Esta carretera, que conecta a los viajeros con la autopista nacional en dirección a las provincias centrales y orientales, es particularmente peligrosa. Las malas condiciones del pavimento y la oscuridad del área facilitan que los encapuchados intercepten a los vehículos, aprovechando que deben reducir la velocidad. Estos delincuentes suelen estar armados y recurren a la violencia para amedrentar a las víctimas, llevándose dinero, celulares y cualquier objeto de valor que encuentren en el equipaje.
Robos en Otras Partes de Cuba
La inseguridad no se limita solo a La Habana. Otras zonas del país, como Jatibonico, también han visto un incremento en los robos. Una víctima que se encontraba en la fila del consulado estadounidense relató cómo fue asaltada junto con sus hermanas al parar en una paladar (restaurante) en una carretera cercana a Jatibonico. Los asaltantes, armados con cuchillos, les robaron hasta los aretes. “Perdí mi green card y las ganas de volver a este país”, confesó la víctima, quien no planea regresar a Cuba después de la traumática experiencia.
La Inacción del Gobierno y la Policía
A pesar de la gravedad de estos incidentes, el gobierno y las autoridades policiales permanecen inmóviles. Los ladrones continúan operando en los mismos puntos críticos de las carreteras cubanas, conscientes de que es poco probable que sean atrapados o enfrentados. Para los viajeros que transitan por estos lugares, la única opción parece ser estar en constante alerta y evitar las zonas más peligrosas en la medida de lo posible.
Si tienes planes de viajar a Cuba o pasar por el aeropuerto José Martí, es fundamental que tomes precauciones adicionales y estés al tanto de las áreas más peligrosas para reducir el riesgo de sufrir un asalto.