La carretera volvió a teñirse de luto este miércoles 24 de abril, cuando dos personas perdieron la vida en un accidente fatal ocurrido en el Cruce de Lajas, un punto caliente entre Contramaestre y Palma Soriano, en plena Carretera Central de Santiago de Cuba.
Según se dio a conocer a través de la página de Facebook “Accidentes Automovilísticos en Cuba”, el siniestro tuvo lugar al mediodía, cuando una guagua Yutong —al parecer arrendada— impactó violentamente contra una motocicleta. Las dos personas que viajaban en la moto murieron en el acto, sin que hasta el momento se conozcan sus identidades.
El silencio tras la tragedia
Como suele pasar en estos casos, la información oficial ha sido escasa. Todavía no se ha confirmado si la guagua pertenecía al transporte estatal, si estaba al servicio de alguna empresa privada o si se trataba de un vehículo turístico. Mucho menos se han aclarado las causas del choque: ¿fue exceso de velocidad? ¿una distracción? ¿una falla mecánica? Todo sigue en el aire.
Mientras tanto, el dolor y la incertidumbre se adueñan de quienes presenciaron la escena o han perdido a alguien en esas mismas carreteras. Porque en Cuba, cada accidente es un eco del abandono vial, de la falta de control y del deterioro general del parque automotor.
Un país atrapado en el peligro
Este accidente no es un caso aislado. Forma parte de una tendencia que no deja de crecer ni de alarmar. Según cifras del propio Ministerio del Interior, solo en el primer semestre de 2024 se reportaron más de 4,000 accidentes de tránsito en el país, con cientos de fallecidos y miles de heridos. Un número que habla alto y claro de una realidad que muchos prefieren ignorar.
Entre las causas más señaladas, las autoridades mencionan desde despistes al volante y violaciones del derecho de vía, hasta vehículos en mal estado, carreteras llenas de baches y consumo de alcohol. Una mezcla explosiva que convierte cualquier viaje en un riesgo.
