La querida actriz cubana Coralita Veloz, todo un ícono del cine, la televisión y el teatro en la Isla, vivió hace poco un susto bien serio: una caída en su propia casa en Miami le fracturó el hombro derecho, y tuvo que ser operada de urgencia para no perder la movilidad del brazo.
Todo pasó una mañana cualquiera, el 10 de abril. Coralita, que tiene 75 años pero anda siempre activa y de buen ánimo, salió al portal a despedir a su nieto Iré. Fue cuestión de segundos: resbaló, cayó mal y el dolor no la dejó ni moverse.
Al principio parecía que no era nada grave. En el hospital le dijeron que no hacía falta cirugía, que con reposo y calmantes iba a estar bien. Pero los días pasaban, el dolor no aflojaba, y la preocupación crecía. Su hija, la también actriz y presentadora María Karla Rivero Veloz (Maka), se puso manos a la obra y buscó una segunda opinión en el hospital Kendall.
Ahí sí vino la sorpresa: el especialista fue clarito como el agua. «Si no te operas, en dos meses el dolor se va… pero ese brazo no lo vas a poder usar más», le dijo el médico sin medias tintas.
Coralita se quedó en shock, claro. Y con razón. “Es duro que te digan eso por la tarde y que te ingresen a las seis de la mañana siguiente”, contó Maka en su canal de YouTube, La Casa de Maka. Pero no había tiempo que perder: la fractura no podía seguir esperando.
La operación fue seria, bajo anestesia general y duró más de una hora. Le colocaron una placa con tornillos para corregir el daño. «Estoy atornillada», dijo Coralita con su humor intacto, mientras se enfrenta con fuerza y disciplina a las terapias que le tocan ahora.
Aunque la recuperación no ha sido fácil y la herida quirúrgica es bastante grande, la cirugía fue un éxito total. Coralita ha demostrado lo que siempre ha tenido de sobra: valentía, energía y un corazón enorme que no se deja vencer por nada.
Tanto ella como Maka han querido agradecer públicamente a todas las personas que han estado pendientes. Desde familiares y amigos hasta fans en Cuba y fuera de ella, la ola de cariño ha sido inmensa.
«Cuando uno pasa por algo así, es cuando se da cuenta de la familia y los amigos tan lindos que tiene. Eso sí que alivia el alma y hasta el dolor», confesó Coralita, emocionada.
La familia decidió no contar nada al principio para no preocupar de más, hasta tener todo bajo control. Pero ya con la operación hecha y el camino de la recuperación empezado, quisieron compartir esta etapa como un gesto de gratitud hacia quienes han estado al tanto con amor y buena vibra.
Coralita Veloz no necesita presentación. Es una de esas artistas que marcó generaciones enteras con su talento y su entrega. Su nombre tiene peso, pero también cariño. Y aunque esta caída fue un golpe duro, nadie duda de que saldrá adelante con la misma dignidad que ha mostrado toda su vida.
Mientras sigue sanando, es muy probable que Coralita nos regale más detalles y reflexiones desde el canal que comparte con su hija. Allí la esperan miles de seguidores con el corazón abierto, deseando verla bien y con esa chispa que la hace única.
