El congresista cubanoamericano Carlos Giménez no se anda con rodeos. Este jueves, desde sus redes sociales, lanzó un mensaje claro y sin adornos: si tú vienes a Estados Unidos a buscar dólares para después ir a sostener a la dictadura en Cuba, tu visa puede irse por donde vino.
Según contó el propio legislador, su oficina ha estado recibiendo denuncias de artistas y voceros del régimen que andan viajando a territorio estadounidense —con visa en mano y sonrisa puesta— pero que detrás del telón le hacen el juego al castrismo, llevando dinero, contactos o apoyo a quienes desde La Habana siguen apretando el puño sobre el pueblo.
“El tener una visa para entrar a USA es un privilegio y será revocada. Están avisados”, escribió Giménez en su cuenta de X (antes Twitter), dejando claro que el relajo se va a acabar.
Desde el exilio cubano, especialmente en el sur de la Florida, las reacciones no se hicieron esperar. Muchos celebraron el mensaje del congresista, hartos de ver cómo personajes que se han pasado años defendiendo al régimen, de pronto aparecen disfrutando las libertades del sistema democrático estadounidense.
Porque sí, mientras en Cuba persiguen al que opina diferente, esos mismos voceros de la represión terminan tomándose selfies en Miami Beach o comiéndose una hamburguesa en Hialeah como si nada hubiera pasado. Y eso, para muchos, es un insulto a los que de verdad han sufrido el exilio.
Giménez, que representa una zona clave del sur de la Florida, ha sido una de las voces más firmes en denunciar la presencia de castristas “camuflados” en Estados Unidos, especialmente en espacios culturales y mediáticos.
Aunque no soltó nombres, su advertencia dejó entrever que hay casos bajo la lupa, y que ya podrían estar en el radar de las autoridades migratorias.
Este fenómeno —que ya ha generado más de una polémica en redes— ha reactivado los pedidos para que se endurezca la política migratoria hacia quienes, aunque entren al país legalmente, mantienen vínculos ideológicos o económicos con el aparato represivo de La Habana.
“No puede ser que se beneficien del sistema que critican mientras siguen aplaudiendo la represión desde afuera”, comentaban usuarios en respuesta al tuit del congresista.
En paralelo, Giménez sigue apostando por un enfoque de “mano dura” contra el régimen cubano. Recientemente propuso suspender los vuelos y las remesas hacia la isla, con la intención de cortar las fuentes que mantienen respirando a la maquinaria castrista.
En declaraciones a Telemundo 51, fue enfático: “Hay que quitarles el dinero. Es la única forma de debilitarlos”. Para él, se trata de una dictadura asesina que no solo oprime a su pueblo, sino que representa un riesgo para la seguridad nacional de Estados Unidos.
Así que ya lo sabes: si te la das de artista patriótico en Cuba pero luego te escapas para gastarte los dólares del imperio en Walmart, te puede salir el tiro por la culata. La visa no es un derecho, y cada vez hay más ojos mirando a ver quién juega sucio en este tablero político.