Sí, aunque parezca increíble, en pleno 2025 aún hay quien ve a un animal herido y en peligro como una simple mercancía. Esta vez, la víctima fue un aura tiñosa —ese ave grande y feúcha, pero clave en el equilibrio del ecosistema— que terminó encerrada en una jaula y puesta a la venta en La Habana como si fuera una bicicleta usada.
La denuncia la hizo la organización Bienestar Animal Cuba (BAC) en su capítulo habanero. Todo comenzó el 30 de abril, cuando la protectora Avril Gutiérrez descubrió en el grupo de WhatsApp “Compra y Venta Güinera” un anuncio espeluznante: una usuaria identificada como Mirelsy ofrecía un Cathartes aura (ese es su nombre científico) completamente herido y enjaulado. Y lo peor: como si no pasara nada.
BAC no tardó en encender las alarmas. En su publicación de Facebook explicaron que el pobre animal estaba en condiciones de maltrato evidente, sin poder volar, sin su alimentación natural… y básicamente, condenado a morir en cuestión de horas.
Además de lo éticamente inadmisible, lo que hizo esta persona es ilegal. El Decreto-Ley 31/2021 de Bienestar Animal y su reglamento dejan bien claro que maltratar, capturar o privar de libertad a un animal salvaje es una infracción muy grave, con multas, decomisos y hasta suspensión de tenencia de animales. Y por si fuera poco, la Ley 81/1997 de Medio Ambiente prohíbe el tráfico de fauna silvestre en Cuba.
BAC fue claro: exigen la liberación inmediata del ave y sanciones ejemplares. También llamaron a todos los ciudadanos a denunciar estos hechos a la Policía Nacional Revolucionaria (PNR), a compartir las pruebas en redes y a presionar a Sanidad Animal para que haga algo. Porque si no lo hacemos nosotros, ¿quién?
Y lo más triste es que esto no es un caso aislado. En abril también circuló en redes un video de una lechuza atrapada dentro de una cubeta, cubierta con una tabla de madera. La indignación no se hizo esperar. Esa lechuza, al igual que el aura tiñosa, estaba siendo vendida ilegalmente, probablemente para rituales religiosos. Otra organización, Protección Animal SOS (PASOS), terminó rescatándola por 5,000 pesos, después de regatear desde 10,000. A pesar del esfuerzo, lamentablemente, el ave murió poco después.
Cuba aprobó en 2021 un decreto de bienestar animal que parecía prometer mucho… pero en la práctica, las denuncias siguen demostrando lo contrario. Las sanciones son mínimas, los controles son escasos y la impunidad es la reina del show.
¿Hasta cuándo seguirán tratando a nuestros animales como si fueran cosas? Los protectores no se rinden, pero hace falta que todos despertemos.
