Lo que empezó como un roce de tráfico entre dos vehículos estatales terminó siendo una escena de película de acción, pero sin efectos especiales y con consecuencias bien reales. El lugar: una calle céntrica de Cárdenas. Los protagonistas: un ómnibus de Transtur y un camión grúa de Asistencia Técnica en la Vía (ATV), ambos parte del mismo sistema estatal.
Los videos que circulan por Facebook no dejan espacio para la duda: hubo gritos, golpes y hasta un choque intencional, todo frente a la mirada atónita de varios testigos. Y como suele pasar en Cuba, el chisme se regó más rápido que el apagón de cada noche.
Aunque nadie ha soltado la versión oficial del cuento, en redes se comenta que la bronca comenzó por una mala maniobra en la vía. Algunos especulan que el camión de ATV estaba respondiendo a un llamado técnico del propio ómnibus, pero eso no se ha confirmado oficialmente.
Lo cierto es que, según testigos y publicaciones en grupos como “Accidentes Buses & Camiones”, el pleito se calentó cuando el chofer del camión fue agredido por el conductor del ómnibus y al menos dos acompañantes que, dicen, llevaban bates en la mano. Sí, como si fuera un juego de pelota, pero sin estadio.
En uno de los videos que más ha dado que hablar, se ve al chofer del camión caminando entre la gente, subirse a su vehículo y, sin pensarlo dos veces, echarlo en reversa directo contra el ómnibus. No una, sino dos veces lo impacta, mientras los presentes gritan, algunos atónitos y otros filmando como si estuvieran en una función de cine.
La reacción en redes no se hizo esperar. Muchos usuarios han mostrado su indignación, no solo por la violencia, sino porque temen que se quiera culpar solo al chofer del camión, mientras los otros implicados –que supuestamente tienen «palanca» en las altas esferas– queden como si nada.
Hasta ahora, ni pío han dicho las autoridades, y no se sabe si alguno de los involucrados enfrenta algún tipo de investigación o sanción.
Lo que sí se sabe es que ambos vehículos son parte de Transtur S.A., empresa estatal subordinada al Ministerio de Turismo, bajo el paraguas del Grupo Empresarial Extrahotelero CUBASOL S.A.. Esta OSDE agrupa a gigantes del sector como Palmares, Caracol, Marlin y la propia Transtur, que mueve miles de trabajadores por todo el país bajo marcas conocidas como CUBACAR, HAVANAUTOS, REX y Transtur.
Con tanto personal y recursos, cuesta creer que el profesionalismo haya quedado fuera de servicio justo ese día. El incidente no solo deja mal parados a los implicados, sino que lanza una alerta sobre el comportamiento de algunos trabajadores del sector turístico estatal, que deberían estar enfocados en dar “calidad, servicio y excelencia”, como dice su lema… y no haciendo espectáculo en plena calle.
Una cosa es tener un mal día al volante, pero otra muy distinta es convertir la vía pública en un cuadrilátero. ¿Será que esto trae consecuencias o se queda como otro suceso más que se pierde entre comentarios de Facebook? El tiempo dirá.
