La comunidad cubana en Estados Unidos vuelve a vestirse de luto tras la muerte de Sheila Almenares, una joven que falleció en Texas luego de sufrir un terrible accidente de tránsito. Lo que parecía ser un día más en su nueva vida en EE. UU. terminó en una tragedia que ha dejado sin palabras a amigos, familiares y conocidos.
Un accidente inesperado que terminó en dolor
Sheila tuvo el accidente el pasado 2 de mayo en la ciudad de Waco, Texas, según se conoció por una campaña de recaudación de fondos iniciada en GoFundMe. Lo más doloroso del caso es que la joven había estado ayudando con los gastos de repatriación de su abuelo, fallecido apenas dos días después del accidente, el 4 de mayo. Era un momento de duelo que terminó convirtiéndose en doble tragedia.
Lesiones demasiado graves
Los médicos no pudieron hacer mucho. Las lesiones que sufrió Sheila eran tan graves que las esperanzas de recuperación eran prácticamente nulas desde el principio. La noticia corrió como pólvora en redes sociales, donde muchos de sus allegados comenzaron a compartir mensajes de despedida y dolor.
Un adiós lleno de tristeza
Entre los mensajes, destacan palabras como las de Jenni Moreno Ramírez, quien escribió: «Estoy muy triste, ya habíamos hablado para vernos y no pudimos. A veces la vida es muy, pero muy injusta.» Otro mensaje que tocó corazones fue el de Surmaily Vinent Venero, quien expresó: «No hay palabras ni frases de consuelo. Tengo muchos buenos recuerdos.»
Silencio sobre cómo ocurrió todo
Hasta el momento, no se conocen los detalles exactos del accidente. En la publicación de GoFundMe, la familia solo pidió oraciones, apoyo y donaciones para cubrir los gastos del funeral. «Agradecemos a todos los que compartieron su tiempo con estas dos hermosas personas,» escribieron.
No es el único caso reciente
Lo más alarmante es que no se trata de un caso aislado. Apenas unas semanas antes, un adolescente cubano de 14 años falleció en otro accidente en Homestead, Florida. Había emigrado con su familia hacía solo nueve meses. Y el 27 de abril, Alexei Primelles Álvarez, otro cubano, murió trágicamente en su primer día de trabajo en Arizona.
Vidas que buscaban empezar de nuevo
Todos estos jóvenes tenían algo en común: buscaron en Estados Unidos un nuevo comienzo, alejados de las dificultades económicas, la falta de oportunidades y la incertidumbre que se vive en Cuba. Pero el destino fue cruel. Y mientras una comunidad llora, otra vez, la pregunta queda en el aire: ¿hasta cuándo tantas pérdidas?