¡Ay, mi madre! Las redes sociales están encendidas otra vez, y esta vez el fuego lo avivó un chisme sabrosón que involucra nada menos que a Ana Gabriel y a la inconfundible Doctora Polo, la reina del martillo en «Caso Cerrado». La cosa llegó a tanto que hasta se habló de boda… pero como suele pasar, no todo lo que brilla es oro.
El rumor arrancó con fuerza gracias a un audio supuestamente de Pati Chapoy, donde se afirmaba que ambas se habían casado en secreto en Miami, en una ceremonia privada y bien recogidita. Según ese audio, solo los allegados sabían del supuesto enlace. Pero compay, agárrate: todo era un invento fabricado con inteligencia artificial. ¡Sí, como lo lees! Un audio montado con IA que sonaba tan realito, que más de uno lo creyó.
El que puso los puntos sobre las íes fue el youtuber Michell Rubalcava, quien salió al paso y aclaró que ese contenido no era más que una jugada digital, de esas que están envenenando las redes y confundiendo hasta al más vivo.
Y claro, no podía faltar la reacción de la propia Doctora Polo, que con su estilo directo, sin pelos en la lengua, le metió candela al rumor en una entrevista con Javier Ceriani. Con cara de «¿qué clase de locura es esta?», soltó: “Vamos a aclarar una cosa: yo no me he casado con Ana Gabriel. ¿A quién se le ocurre esa estupidez?”, dejando claro que ni anillo, ni arroz, ni luna de miel hubo ahí.
Hasta bromeó con una imagen alterada que acompañó el rumor, donde le pusieron una “manzana de Adán” de adorno, como para completar el circo. Indignada pero con un toque de sarcasmo, advirtió sobre el peligro de jugar con la inteligencia artificial: “¡Qué ridiculez es esa! ¡Qué inteligencia artificial, señores! Por Dios, cuidado con la inteligencia artificial”, dijo entre risas y fastidio.
Y por si fuera poco, esta no es la primera vez que Ana Gabriel queda atrapada en la telaraña de las fake news. A principios de año, el periodista Jorge Carbajal soltó que la cantante se había casado con una fan peruana llamada Silvana Rojas. Pero la misma Ana, con su estilo campechano, aclaró la cosa entre carcajadas: “Yo no me he casado, aunque se diga lo contrario. Ya hasta me río de todo esto”.
Así que ya tú sabes, todo este zafarrancho no es más que una novela digital sin pies ni cabeza, alimentada por voces clonadas y montajes baratos. Ni Ana Gabriel ni la Doctora Polo han pasado por el altar, ni juntas ni por separado.
En tiempos donde un rumor puede explotar en segundos, queda claro que hay que andar con cuatro ojos en redes sociales. Porque como dijo la Doctora: “¡Cuidado con lo que creen y comparten, que la inteligencia artificial está suelta y sin correa!”.