Después del sustazo del viernes, cuando un tren cargado de alcohol se descarriló e incendió en plena Línea Central del ferrocarril en Matanzas, las autoridades cubanas informaron que el tránsito ferroviario fue restablecido este domingo. Y aunque todo el mundo respiró aliviado, las preguntas sobre por qué pasó siguen sin respuesta.
El mismísimo ministro de Transporte, Eduardo Rodríguez Dávila, fue quien dio la noticia. A través de sus redes sociales anunció que en la madrugada del domingo se logró reabrir la vía de manera preliminar, tras intensas labores de reparación en el tramo afectado, exactamente en el kilómetro 80,500.
Recordemos que el accidente ocurrió cuando un tren que llevaba pailas de alcohol desde Sancti Spíritus rumbo a Mayabeque se salió de la vía. Cinco vagones cisterna estuvieron involucrados y uno incluso terminó incendiado, encendiendo todas las alarmas (y no solo las del tren).
Aunque ya se puede circular por la zona, las investigaciones sobre lo que causó el accidente siguen en curso. El ministro prometió que, más adelante, se darán detalles sobre las conclusiones, pero por ahora… a seguir esperando el parte oficial.
En su publicación, Rodríguez Dávila no se olvidó de agradecer el esfuerzo colectivo que se armó para salir del desastre. Desde bomberos y policías hasta empresas como Tecnoazúcar y Cubaron, todos pusieron manos a la obra para que el daño no pasara a mayores, y sobre todo, para que los pasajeros no se vieran tan afectados en un fin de semana especial para muchas familias.
El incendio, que ocurrió cerca de la comunidad Benavides, en Paso del Medio, fue contenido por los comandos 1 y 2 de bomberos de Matanzas, que evitaron que el fuego se extendiera al resto del tren o a zonas pobladas. Y, por suerte, no hubo heridos ni víctimas fatales que lamentar. Eso sí, el susto fue grande.
Este descarrilamiento se suma a la preocupante lista de accidentes ferroviarios en Cuba. En abril, un tren que iba de Holguín a La Habana se descarriló en Las Tunas. En diciembre, dos trenes de carga chocaron en Sancti Spíritus y hubo un derrame de petróleo. La situación del sistema ferroviario no pinta bien… y este caso lo confirma.
Por ahora, la vía está arreglada, pero el sistema sigue chirriando. Y el “accidente del tren de ron” deja claro que en Cuba, hasta el transporte necesita un rescate urgente.