Un accidente de película sacudió la noche del domingo en la conocida curva de la “Novia del Mediodía”, en plena Autopista de San Antonio de los Baños, en Artemisa. Quienes conocen bien esa vía saben que no es juego —esa curva tiene fama de traicionera, sobre todo cuando cae la noche y la visibilidad se pone a medias.
El protagonista del siniestro fue un carro gris, que todo apunta a que era un Moskvich de los tiempos soviéticos, de esos que aún siguen rodando por pura terquedad mecánica. Según testigos, el vehículo perdió el control y fue a dar de frente contra un objeto fijo. El impacto fue tan fuerte que la trompa del auto quedó hecha puré.
El conductor quedó atrapado entre el asiento y el timón, sin poder moverse, en una escena que parecía sacada de una pesadilla. Fue gracias a la rápida llegada de los bomberos y al apoyo de varios vecinos que estaban en el lugar, alumbrando con sus celulares, que se logró liberar al hombre con vida. Las imágenes compartidas en el perfil de Facebook ‘La Tijera’ muestran a los rescatistas maniobrando con herramientas hidráulicas para sacarlo, jugándosela toda.
Aunque hasta ahora no hay información oficial sobre el estado de salud del chofer, fuentes cercanas aseguran que sobrevivió al encontronazo, y fue llevado en ambulancia directo al hospital. El carro, eso sí, quedó destrozado de adelante, dejando claro lo brutal que fue el golpe.
Las autoridades están investigando qué fue lo que pasó realmente. Nadie ha confirmado si hubo exceso de velocidad, algún desperfecto técnico o simplemente mala suerte. Lo cierto es que esa curva no perdona errores.
La “Novia del Mediodía” tiene historia, y no solo por su nombre curioso. Ahí mismo funcionaba en los años 50 un autocine con ese nombre, pero hoy lo que queda es un tramo de carretera maldita, que ha cobrado más de un susto. No es la primera vez que se reporta un accidente grave en ese pedazo de vía.
Hace poco, en mayo de 2024, un choque entre un almendrón y un camión cisterna en ese mismo lugar dejó el vehículo hecho un acordeón, y todos los que pasaron por ahí se persignaron al ver la escena. Lo mismo ha ocurrido en otros puntos del occidente cubano, como en Marianao, donde un bache provocó una tragedia, o en La Lisa, donde un carro y una moto colisionaron por falta de señalización.
La situación de las carreteras en Cuba sigue siendo una deuda pendiente. El deterioro del pavimento, la escasa visibilidad nocturna y la falta de señalización son una receta peligrosa que muchos conductores enfrentan a diario. Y aunque esta vez no hubo que lamentar una muerte, el susto fue de los grandes… y la historia se repite demasiado seguido.
