Otro accidente más estremeció este fin de semana la Autopista Nacional, esta vez en el tramo que conecta los municipios de Unión de Reyes y Nueva Paz, en la provincia de Matanzas. El saldo preliminar dejó seis personas heridas, luego de que el chofer de un carro perdiera el control del volante en plena vía.
Según reportes de la prensa oficial local, tres de los lesionados fueron atendidos de inmediato en el policlínico Octavio de la Concepción, allá en la zona de Alacranes, mientras los demás fueron canalizados para recibir atención médica, aunque todavía no se ha dicho con claridad qué tan graves están.
Testigos en el lugar soltaron que, al parecer, el accidente fue por una falla técnica en el vehículo. Aun así, las autoridades no han querido cantar victoria y continúan investigando para saber exactamente qué pasó. No es la primera vez que la falta de mantenimiento mecánico se convierte en protagonista en las carreteras cubanas.
Y por si fuera poco, apenas un día antes, otro accidente fatal sacudió la Autopista Nacional, esta vez en Villa Clara, a la altura del kilómetro 277. Ese sí fue duro: cuatro personas perdieron la vida y tres quedaron en estado crítico.
En ese caso, los carros involucrados fueron un Peugeot 405 (matrícula P 122 449) y un Geely MK (chapa P 202 650). Las imágenes que circularon por Facebook fueron un poema trágico: uno de los vehículos, el Peugeot, quedó convertido en chatarra, totalmente desbaratado.
Los tres heridos de gravedad fueron llevados con urgencia al Hospital Provincial Arnaldo Milián Castro, donde siguen luchando por su vida. El pronóstico, hasta ahora, sigue en veremos.
Todo esto vuelve a encender las alarmas sobre la crisis vial que vive Cuba. Las carreteras están hechas leña, los carros viejos andan con hilos y los conductores, muchas veces, están más cansados que una madre soltera con tres trabajos. La falta de señalización, el mal estado del parque automotor y el agotamiento de quienes manejan siguen costando vidas.