Con la voz temblorosa y los nervios a flor de piel, un joven que fue testigo directo del brutal asesinato de la cubana Davely Morales, confesó que la escena lo marcó para siempre. Aquella noche, en un apartamento de Pike Street, en Georgetown, el horror se metió por la puerta… y no ha salido de su mente desde entonces.
Contó a un medio local que lo despertaron unos gritos desgarradores. Cuando se asomó, vio lo impensable: una puerta entreabierta y a un hombre —cubano como él— atacando con un cuchillo a dos mujeres. Eran Davely y su madre, Milaysi Rodríguez.
Intentó intervenir, pero la escena era caótica. “Era imposible meterse en el medio”, relató visiblemente afectado. Se refugió en su cuarto por un momento, tal vez buscando fuerzas o protección. Pero cuando regresó, Davely ya venía tambaleándose, pidiendo ayuda con la mirada, hasta que su cuerpo no aguantó más y cayó al suelo.
Muchos en redes sociales salieron a defender al joven. “No es cobardía, es instinto de supervivencia”, comentaban. Otros, más empáticos, señalaron que el muchacho necesita atención psicológica urgente, pues lo vivido no se borra con facilidad.
Davely Morales, de apenas 21 años, perdió la vida a manos de su padrastro, Wispriey Alfonso, un cubano de 40 años. También resultó gravemente herida su madre, Milaysi, quien aún lucha por su vida en un hospital de Georgetown. El ataque ocurrió en el apartamento donde la familia —recién llegada desde Cuba hacía solo un mes— intentaba comenzar de cero.
El agresor, armado con un cuchillo de carnicero, atacó sin piedad. Tras cometer el crimen, huyó por unas horas, pero luego se entregó a la policía de Kitty, con el arma todavía manchada de sangre. Ahora colabora con la investigación, mientras la comunidad intenta entender por qué ocurrió algo tan atroz.
Davely trabajaba como representante de ventas. Vivía junto a su madre, su hermana pequeña de nueve años y Alfonso. La familia buscaba un futuro mejor, pero encontró la tragedia.
La escena fue atendida por bomberos y paramédicos que confirmaron la muerte de la joven en el lugar. Su cuerpo, con profundas heridas en las manos, nuca y mandíbula, fue llevado a la Funeraria Memorial Gardens, donde se le practicó una autopsia para determinar oficialmente la causa de su fallecimiento.
Milaysi, la madre, permanece ingresada en estado crítico, mientras amigos y conocidos organizan una campaña en GoFundMe para cubrir los gastos del funeral, programado para el 30 de mayo.
Por ahora, la policía guyanesa no ha dado detalles sobre el motivo del ataque, y la embajada cubana en Guyana sigue en silencio.







