En medio del enfado que reina en la calle y en las redes, el presidente cubano Miguel Díaz-Canel decidió salir al paso del descontento popular por las tarifas dolarizadas de ETECSA, y lo hizo con un argumento que dejó a más de uno con la ceja levantada.
Durante su pódcast oficial Desde la Presidencia, transmitido por los medios estatales, el mandatario intentó justificar el tarifazo comparando la situación de Cuba con la del resto del planeta. Según él, hay más de 2,500 millones de personas en el mundo sin acceso a internet ni a la telefonía móvil, así que, en su opinión, el cubano no debería quejarse tanto.
“No se trata de complacer a nadie, pero estamos garantizando lo mínimo, algo elemental, al alcance de todos”, dijo Díaz-Canel, como quien ofrece un pan con croqueta y pide que se agradezca la bondad.
A su lado, el viceministro de Comunicaciones, Ernesto Rodríguez Hernández, no perdió la oportunidad para meter su cucharada y soltar que “Cuba tiene un nivel de penetración de internet por encima de la media mundial”. Una afirmación que muchos consideran bastante alejada de la realidad vivida por millones de cubanos.
Excusas en medio del apagón digital
Estas declaraciones llegan justo cuando la cosa está que arde. Las protestas estudiantiles, los cortes de electricidad y la exclusión digital están en su punto más alto, y la ciudadanía no ha dejado de señalar el golpe al bolsillo que significan las nuevas tarifas de ETECSA.
El “paquetico mínimo” al que se refiere el presidente no parece tan accesible cuando un plan de datos supera los 11,000 pesos cubanos, más del doble del salario mínimo, mientras que los que pagan en moneda nacional apenas pueden recargar hasta 360 CUP al mes.
A esto se suma que los paquetes en dólares —los verdaderamente funcionales— solo pueden adquirirse con tarjetas extranjeras o mediante Monedero MiTransfer, lo que abre aún más la brecha digital entre quienes tienen familiares afuera y quienes dependen únicamente del magro ingreso local.
¿Una amenaza velada desde ETECSA?
Durante el mismo programa, la presidenta de ETECSA, Tania Velázquez, no se quedó callada y lanzó otra perla que dejó a muchos con los ojos abiertos. Advirtió que la red de telecomunicaciones del país podría colapsar si no se hacen los cambios que están implementando ahora.
“Hay fallos que nos podrían llevar a un apagón total. Eso implicaría quedarnos sin llamadas, sin mensajes, sin acceso al trabajo ni a los estudios”, explicó la funcionaria, dibujando un escenario apocalíptico que, más que informar, pareció una manera elegante de decir: “aguanten el golpe, o lo pierden todo”.
Estudiantes en pie de lucha, gobierno sin respuestas
Las reacciones no se hicieron esperar. Estudiantes de la Universidad de La Habana siguen en paro académico indefinido, y han lanzado duras críticas contra la FEU, acusándola de actuar más como altavoz del gobierno que como representante del estudiantado.
Mientras tanto, Díaz-Canel reconoció que hay “críticas e insatisfacciones”, pero se limitó a escucharlas con cara seria, sin ofrecer ni una solución concreta ni abrir la puerta a revisar las tarifas impuestas.
La sensación en la calle es clara: el pueblo siente que le subieron los precios sin aviso y sin compasión, y que las justificaciones del gobierno suenan más a justificaciones de última hora que a verdaderos intentos de resolver los problemas.