Una brigada de la Empresa Eléctrica dejó a un barrio entero sin corriente por 24 horas tras un “trabajito” que, en teoría, era para evitar problemas mayores durante la temporada ciclónica. ¿El resultado? Todo lo contrario.
El “arreglo” que trajo más líos
Todo ocurrió este miércoles en la calle Rastro, justo detrás del Ateneo de Holguín. Como parte del plan preventivo por las lluvias y los vientos, la eléctrica mandó una cuadrilla a podar los árboles del barrio. La idea era que ninguna rama traviesa tumbara los cables y dejara sin luz a la gente cuando arremetiera el mal tiempo.
Pero los muchachos, en vez de cortar ramas, cortaron el cable que no era. Y lo más bravo del caso es que después de eso, se fueron como si nada, dejando el problema atrás y a toda la cuadra a oscuras.
24 horas a ciegas y sin gas
Una vecina, que por miedo prefiere no decir su nombre, contó a CiberCuba que la luz se fue desde las seis de la mañana del miércoles y no regresó hasta la misma hora del día siguiente. Según ella, lo que tocaba ese día era el clásico apagón rotativo, de 6:00 a.m. hasta el mediodía. Pero cuando debía volver la corriente, nada. Solo en ese pedazo de calle, unos 70 u 80 metros, el apagón duró 24 horas corridas.
Para colmo, llevan más de tres meses sin gas licuado, así que imagínate el cuadro: sin luz, sin gas, sin comida caliente y con abuelos encamados y niños chiquitos pasando el sofoco. “Esto es inhumano, chico”, soltó la denunciante.
El “caballito” que no trajo solución
Como si no bastara con eso, cerca de las 10 de la mañana se apareció una guagüita de la Empresa Eléctrica. Colocaron un “caballito”, ese artilugio que ponen para sujetar los cables, pero ni se bajaron a revisar el daño ni preguntaron nada. Dejaron el caballito y se fueron en su viaje.
Después de muchos timbrazos, lograron que alguien respondiera al teléfono y dijera que “el operario” reportó que se necesitaban seis metros de cable de cobre. Pero nadie por allí vio a ningún técnico. Entonces la vecina se pregunta, con toda la razón del mundo: “¿Qué operario fue ese? ¿O será que ese cable lo quieren para otra cosa y están metiendo el cuento?”
“Una falta de respeto”
Molesta y con razón, la afectada describió la situación como una “falta de respeto que rebasa todos los límites”. El barrio estuvo completamente desconectado por culpa de una metida de pata que nadie quiso resolver de inmediato. La luz finalmente volvió a las 6:00 a.m. del jueves, pero el mal rato ya estaba hecho.
Apagones que no dan tregua
Todo esto se da en medio de una crisis energética que tiene a Cuba patas arriba. En lo que va de junio, el país está viviendo apagones larguísimos, de más de 10 y hasta 12 horas en algunos lugares. Entre mantenimientos en las termoeléctricas, averías en Felton y Guiteras, y la falta de combustible para mantener encendidos los grupos electrógenos, la situación se ha puesto crítica.
Desde el gobierno insisten en que en julio la cosa mejorará. Pero ya eso mismo lo prometieron en 2024… y vimos cómo acabó el cuento. Así que la gente no se come ese caramelo sin azúcar.
Mientras tanto, en la calle Rastro y en muchos otros rincones de Cuba, la oscuridad sigue siendo parte del día a día. Y el que no tenga linterna, que rece.