La provincia de Granma volvió a ser escenario de otro de esos accidentes que nos recuerdan lo frágil que puede ser la vida en una isla donde el deterioro vial, la falta de control y el desorden urbano se combinan como ingredientes de una receta trágica.
Este jueves, en la zona de los elevados de Bayamo, una grúa terminó fuera de control tras esquivar a un ciclista que, al parecer, se voló la señal de pare como si nada. El conductor del pesado vehículo, en su intento por evitar la tragedia, acabó estrellándose contra dos viviendas y un kiosco pintado de verde, dejando un panorama de destrucción que todavía se comenta en las calles.
Por pura suerte —y quizás por intervención divina— no hubo muertos que lamentar, aunque el chofer sí recibió varios golpes. Según los primeros reportes, se encuentra fuera de peligro.
Las imágenes del siniestro circularon rápidamente en Facebook gracias al usuario Jose Andres Arias Artal, que compartió los detalles en el grupo ACCIDENTES BUSES & CAMIONES por más experiencia y menos víctimas!.
Pero como si no bastara con ese susto, el pasado sábado otro accidente estremeció a la provincia, esta vez en el municipio de Guisa, dejando un saldo devastador: dos personas fallecidas y varios heridos, según denuncias de vecinos y medios comunitarios que no se callan, a pesar de la censura y el miedo.
Los testigos relataron que el hecho ocurrió entre El Patio y Figueredo, en la conocida Comunidad Ortega. Un ciclista en la vía provocó una maniobra desesperada del conductor de un camión, que intentó esquivarlo. Justo en ese momento, otro vehículo venía de frente con las luces largas, encandilando al chofer del camión y causando el vuelco del vehículo en cuestión de segundos.
Una vez más, el caos vial en Cuba cobra víctimas sin que el régimen mueva un dedo para mejorar las condiciones de las carreteras, ni para establecer una señalización decente, ni mucho menos para garantizar una educación vial real.
Lo que queda son escombros, familias en duelo, y un país donde la falta de gestión y el abandono institucional también matan. Porque en esta Cuba rota, hasta un simple paseo en bicicleta puede terminar en tragedia. Y mientras el gobierno sigue haciendo propaganda, la gente sigue contando muertos y recogiendo pedazos de lo poco que le queda.
