Un suceso desgarrador sacudió al municipio del Cerro en las últimas horas: el cadáver de un bebé recién nacido fue hallado dentro de un basurero, justo en la intersección de Infanta y Santa Rosa. La denuncia la hizo pública el activista cubano Yoel Parsons Bones en su perfil de Facebook, y desde entonces, la noticia ha encendido la indignación de muchos.
Hasta ahora, las autoridades no han dicho ni pío. No se sabe quién era la madre, ni en qué condiciones ocurrió esta tragedia. Todo lo que hay son versiones de vecinos que aseguran que el cuerpo fue encontrado por personas que rebuscaban entre los desechos, algo tristemente habitual en las ciudades cubanas donde la pobreza obliga a la gente a revolver la basura como única alternativa para sobrevivir.
Otra víctima del abandono y del sistema roto
Este hecho no es un caso aislado. Desde que comenzó la pandemia, han sido varios los bebés encontrados muertos en condiciones similares. En diciembre de 2023, por ejemplo, otro recién nacido fue hallado dentro de un tanque de basura en Pinar del Río. También hubo casos en La Habana Vieja, Mulgoba y Las Tunas. Todos con el mismo patrón: madres desesperadas, falta de apoyo, y un Estado que ni se inmuta.
¿Qué está pasando en Cuba para que estas tragedias se repitan?
Escasez de anticonceptivos, salud sexual colapsada y nulas opciones para abortar de forma segura. Así lo resumen expertos y activistas que llevan tiempo denunciando que la crisis del país también tiene un rostro femenino y doloroso. Muchas mujeres no desean o no pueden ser madres, pero se encuentran atrapadas entre la precariedad y la falta de opciones reales.
Una trabajadora social habanera, que habló bajo condición de anonimato por miedo a represalias, fue clara: “Las mujeres están solas. Sin recursos, sin apoyo psicológico, sin información. Y en medio de esa desesperación, toman decisiones que marcan una vida —o la terminan— en un segundo. El Estado es responsable, por no garantizar alternativas dignas ni un sistema de adopción que funcione”.
¿Y dónde está el aparato estatal cuando más se necesita?
En vez de reforzar los programas sociales o mejorar el acceso a métodos anticonceptivos, el régimen sigue en su nube ideológica, más preocupado por mantener el control que por cuidar a los más vulnerables. Mientras tanto, la gente sigue abandonada, literalmente. Y en el caso de la infancia, los resultados son trágicos.
Desde redes sociales, algunas cuentas como “El Guardián del Aliento” han hecho llamados urgentes a las mujeres que no puedan asumir la maternidad. “Si no puedes cuidar a tu bebé, busca ayuda, busca a las instituciones. Hay familias que desean adoptar. No estás sola”, escribieron, apelando a la humanidad que el sistema ha perdido hace rato.
Una comunidad con el corazón roto
En el Cerro, la tristeza se mezcla con la rabia. Vecinos exigen que se investigue el caso, que se encuentre a los responsables y que de una vez se tomen medidas reales. Pero el pueblo cubano ya conoce el libreto: silencio oficial, burocracia inerte, y otra vida que se pierde bajo la sombra de un régimen que lleva más de seis décadas dejando a su gente atrás.
Cuba se desangra por todos lados, pero cuando se llega al punto de encontrar bebés muertos en la basura, lo que queda claro es que el país no solo está quebrado económicamente, sino moralmente. Y el mayor crimen es que, aún así, los que mandan siguen mirando hacia otro lado.
