Mientras medio país se queda a oscuras con cada apagón, hay un cubano que no ha perdido ni el clima del cuarto, gracias a un sistema solar que él mismo armó con lujo de detalles. Lo mejor: ¡puede monitorear todo desde Estados Unidos como si estuviera sentado en su patio!
En TikTok, este cubano compartió un video donde muestra su casa en plena faena… mientras el resto del barrio está sin corriente. Todo funciona: aires acondicionados, nevera, luces, fogón, ventiladores, todo gracias al sol. ¿Magia? No. Tecnología e inventiva cubana de la buena.
Su secreto está en un sistema de 16 paneles solares, cada uno de 555W, instalados en su azotea. Con eso, logra generar cerca de 9 kW de potencia usando únicamente energía solar. ¡Y sin baterías aún! Todo lo que produce se usa en tiempo real durante el día.
“Ahora mismo no hay corriente, todo está funcionando con el puro sol”, dice mientras recorre su casa y enciende equipos como si nada. Lo impresionante es que no solo tiene luz, sino que usa dos aires acondicionados a la vez, algo impensable para muchos en Cuba hoy en día.
El corazón de todo el sistema es un inversor híbrido SUNGOLD POWER de 8 kW, conectado con dos entradas MPPT (para los que saben del tema, eso significa que el sistema optimiza automáticamente la carga solar según cómo estén colocados los paneles). Cada entrada llega a 200 voltios. Potente y eficiente.
Además, tiene un panel de control con protecciones contra rayos (muy importante en Cuba), y lo más interesante: monitoreo remoto por Wi-Fi. Esto le permite ver desde su casa en EE. UU. cómo está generando energía su vivienda en Cuba y cuánto está consumiendo.
“Desde que amanece hasta que oscurece estoy generando corriente”, cuenta mientras muestra su azotea reforzada con una buena estructura metálica donde descansan los paneles. Todo bien pensado, todo bien hecho.
En una isla donde los apagones se han vuelto el pan nuestro de cada día, ver una casa completamente funcional gracias a la energía solar no solo genera envidia sana, sino también esperanza. Este cubano demostró que con un poco de inversión, conocimiento y ganas, se puede lograr independencia energética… al menos mientras brilla el sol.
