Un video publicado por los creadores de contenido cubanos @kary_y_jony ha dejado al desnudo, una vez más, la debacle del turismo en Cuba, especialmente en Varadero, que alguna vez fue la joya de la corona para los visitantes extranjeros. Grabado el 26 de junio de 2025, en pleno verano, el material muestra un panorama desolador: calles vacías, aceras sin un alma y un bulevar turístico que parece más un decorado abandonado que el centro neurálgico del principal destino turístico del país.
“Estamos por la calle 59 y son apenas las 11 de la mañana”, comenta la joven en el video, mientras la cámara enfoca lo que parece un pueblo fantasma. A medida que avanza el recorrido por zonas cercanas al hotel Starfish Cuatro Palmas, la sensación de vacío es más evidente. “Caminamos hasta el bulevar y no vimos ni un solo extranjero, todo está vacío”, afirma con asombro.
Y aunque algunos intentaron justificar la ausencia de turistas diciendo que tal vez estaban en la playa o descansando en los hoteles, la mayoría confirmó lo evidente: Varadero está más apagado que los bombillos de la UNE. Un usuario lo resumió así: “Yo fui hace poco, y en el hotel había, con suerte, 15 personas”. Otro fue más directo: “Varadero ya no sirve. Todo está carísimo y los servicios dan pena”.
Cuba: cara, insegura y sin futuro turístico
Los comentarios en redes reflejan el estado de ánimo del cubano de a pie y de los pocos visitantes que aún se atreven. Algunos, con resignación, atribuyen el bajón al calor del verano o a una supuesta temporada baja. Pero otros, sin pelos en la lengua, responsabilizan a los verdaderos culpables: los apagones, la inflación, la escasez, la inseguridad, el deterioro urbano y los hoteles en ruinas.
“Cuba está muy cara e insegura. Falla la luz, no hay comida ni servicios”, escribió un internauta visiblemente decepcionado. Y otro soltó lo que muchos piensan y pocos dicen en voz alta: “Los hoteles están vacíos. Nadie quiere visitar tu paraíso socialista”.
La miseria se confirma con números
Este derrumbe no es solo percepción. Las cifras oficiales no mienten: según la Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI), entre enero y abril de 2025 llegaron apenas 991.103 visitantes, lo que representa una caída del 27 % respecto al mismo período de 2024. Y si nos enfocamos solo en los extranjeros, la cosa es aún peor: solo 741.106 pusieron un pie en suelo cubano en los primeros cuatro meses del año.
La ocupación hotelera está por el piso, apenas un 24,1 %, y eso en el trimestre “fuerte”. Las pernoctaciones cayeron de más de 5 millones a 3,6 millones. Y los ingresos del sector turístico se desplomaron un 21,5 %, golpeando duro a cadenas extranjeras como Meliá, que ya empieza a hacer cuentas negativas con su operación en la isla.
La causa del desastre es clara: el sistema es inviable
No es un problema de marketing ni de “bloqueo” como grita el oficialismo. Lo que hay es una estructura podrida: hoteles sin comida, apagones constantes, transporte en ruinas y una desconexión total entre la realidad económica y las políticas del régimen. Expertos como el economista Pedro Monreal ya han dicho que el turismo cubano sufre un problema estructural, pero en la Plaza nadie escucha.
La Habana también se quedó sin turistas
Y la crisis no es exclusiva de Varadero. La Habana, con todo su encanto histórico, también se ha vaciado. Videos recientes muestran lugares como la calle Obispo y el Barrio Chino completamente desiertos, con comercios cerrados o sin clientes, incluso en fines de semana. El aeropuerto internacional de Varadero, por su parte, luce igual de fantasmal: oscuridad total, sin señalización, sin vida.
A pesar de este panorama desolador, el régimen sigue apostando por construir más hoteles y promover campañas vacías que no convencen ni a los cubanos ni a los turistas. La meta turística del año parece, otra vez, una fantasía para adornar titulares sin sustancia.
