Si alguien sabe lo que es cantar con el corazón en la mano, esa es La Diosa. Pero esta vez no se trata solo de su poderosa voz ni de sus letras explosivas, sino de lo que ha tenido que pagar —literalmente en carne propia— por alzar la suya contra el régimen cubano. En una entrevista cargada de emociones junto a la actriz Judith González, quien conduce un pódcast en YouTube, La Diosa abrió su alma y contó su historia más personal y política. Todo mientras pide apoyo para su próximo concierto el 19 de julio en el Watsco Center de Miami.
El Watsco Center no le es ajeno a La Diosa. Ya lo llenó en su primer gran concierto en Estados Unidos en 2023, demostrando que su música tiene eco, sobre todo entre los cubanos del exilio. Pero esta vez, más allá de la música, la artista está apostando por su historia de vida como su mejor carta de presentación. Quiere que nadie se pierda su show, y tiene poderosas razones para ello.
La actriz Judith González no se anduvo por las ramas y le lanzó la pregunta que todos querían oír: “¿Por qué hay que estar este 19 de julio una vez más contigo en el Watsco Center?”. Y ahí, La Diosa, sin poder contener las lágrimas, soltó una respuesta tan cruda como desgarradora que dejó a más de uno con un nudo en la garganta.
“Porque hay una artista cubana que está dejando el pecho para darle un buen concierto al público. Hay una artista cubana que vino siendo una vulgar, gritona de mierda, pero así gritando los defendía. Porque me he buscado miles de problemas, me han bajado de tarima por hablar de política. Porque me mataron a mi madre. Porque si yo me hubiese callado, mi mamá hubiese seguido viviendo y no le hubiesen quitado el oxígeno. Porque si yo me hubiese callado, mi hermano seguiría vivo en Cuba y me lo mataron también.”
El momento se puso todavía más intenso cuando La Diosa recordó cómo, tras gritar “¡Abajo la dictadura!” en su primer concierto en el Watsco Center, personas afines al régimen cubano atacaron la casa de su familia en Cuba. A pedradas, rompieron todos los cristales. Fue ahí cuando dejó claro, con toda la fuerza de quien ha vivido el precio de la libertad: “Por eso me merezco el apoyo”.
Las palabras de La Diosa tocaron el corazón de muchos de sus seguidores, especialmente de los cubanos en el exilio, que se ven reflejados en su valentía y en su discurso político sin pelos en la lengua. Sin embargo, no todos reaccionaron con empatía. En redes sociales hubo quienes la criticaron por, según ellos, usar su activismo como estrategia para vender entradas.
Entre los comentarios más duros, hubo uno en Instagram que decía: “Levantar la voz por Cuba no te hace especial, te hace cumplir con tu deber. No esperes que te compren entradas por hacer lo que todos deberíamos hacer. LA CONCIENCIA no se COBRA, ni se PROMOCIONA”.
Y otro fue todavía más frontal: “No soporto a los cantantes cubanos rindiendo para que vayan a su concierto. Hasta regalan entradas para poder llenarlo. Un cantante que se respeta no tiene que rendir a sus fanáticos para que vayan a sus conciertos. Si estás pegado y eres bueno, se llena solo. Todavía no los entiendo”.
Entre aplausos, lágrimas y críticas, La Diosa sigue firme. Su historia no deja indiferente a nadie, y ahora, más que nunca, está decidida a llenar el Watsco Center no solo con música, sino con su verdad.
