La influencer cubana Claudia Artiles, quien ha conquistado las redes con su contenido sobre maternidad y vida cotidiana, reapareció visiblemente conmovida para contarle a sus seguidores un difícil momento familiar: su pequeño hijo Marlon fue hospitalizado con neumonía y una infección en los oídos.
Desde una habitación de hospital, con la voz entrecortada y el rostro agotado, Claudia compartió un video donde explica lo que ha vivido en los últimos días. “Sé que muchos han estado preocupados por nosotros. Yo también he estado enferma con un catarro fuerte, pero cuando vi que Marlon no mejoraba, no lo dudé más y lo traje al médico”, confesó con una mezcla de tristeza y alivio.
El niño, de apenas dos años, ya está bajo tratamiento con antibióticos y atención médica constante, según contó la propia joven. Aunque aún se le ve afectada físicamente, Claudia quiso dar la cara para calmar a quienes la siguen: “Les hice este video para que supieran que dentro de lo que cabe estamos bien. Él está dormitido”, comentó mientras enfocaba brevemente al niño descansando a su lado.
Críticas y apoyo en las redes
Como era de esperarse, el video tocó fibras sensibles entre sus seguidores, generando miles de reacciones en cuestión de horas. Muchas personas le enviaron bendiciones y mensajes de fortaleza: “Claudia, no llores, lo estás haciendo bien. Todas aprendemos a ser madres sobre la marcha”, le escribió una usuaria con tono comprensivo.
Sin embargo, también surgieron críticas, especialmente dirigidas al tiempo que la influencer dedica a las redes sociales. “Dedícale más tiempo a tu bebé. Las redes pueden esperar”, le soltó otra internauta, dejando ver ese juicio constante que recae sobre las madres públicas en internet.
Aun así, la mayoría de los mensajes coincidieron en el deseo de pronta recuperación para Marlon, quien ha conquistado también el corazón de muchos usuarios gracias a los momentos que Claudia ha compartido con él en TikTok e Instagram.
“Todo va a estar bien”
Consciente del vínculo emocional que ha tejido con su audiencia, Claudia prometió mantenerlos al tanto de la evolución del niño. En una historia más reciente desde la sala de emergencias, escribió con esperanza: “Todo va a estar bien”, acompañando el texto con una imagen íntima y reconfortante junto a su hijo.
La situación ha sido una especie de llamada de atención tanto para Claudia como para su comunidad. La maternidad no viene con manual, y navegarla en un país como Cuba —con un sistema de salud colapsado, medicamentos en falta y condiciones hospitalarias precarias— es un acto de valentía diaria.
Mientras Marlon se recupera y Claudia intenta reponerse del golpe físico y emocional, lo que queda claro es que, en medio del cansancio y el dolor, ella no suelta la mano de su hijo ni el cariño de quienes la siguen. Una madre cubana más, luchando en medio de las carencias, pero con el pecho lleno de amor y coraje.
