¿Te imaginas entrar a una tienda donde se supone que hay de todo porque es “en dólares” y salir sin comida, pero con confituras? Pues eso mismo le pasó a Sheyla Reyes, una joven cubana que decidió contar en TikTok su odisea comprando en una tienda MLC (Moneda Libremente Convertible) en la isla. El video ya es viral y no es para menos: la historia es el retrato perfecto del absurdo cotidiano que viven miles de cubanos.
Sheyla, que en redes se mueve como @sheyreyes032, fue a la tienda con toda la intención del mundo de comprar carne. Tenía el dinero que le habían mandado del extranjero, el ánimo y la lista hecha. Pero cuando llegó a la zona de congelados, lo que encontró fue un paisaje más frío que el aire acondicionado: ¡las neveras completamente vacías!
Con la carne brillando por su ausencia, no le quedó otra que improvisar. Terminó gastando el dinero en cosas que ni pensaba comprar: juguitos, salsa de tomate, detergente, papel sanitario… en fin, lo que había. “Era lo que había”, dijo en el video, con esa mezcla de resignación y cansancio que ya se ha vuelto marca registrada del cubano de a pie.
Pero eso no fue lo peor. En un momento quiso pagar y… sorpresa: ni la cajera estaba en su puesto. Sheyla tuvo que esperar a que apareciera la empleada, porque, como bien sabemos, el servicio al cliente en estas tiendas estatales no es precisamente el mejor del mundo. La cosa se pone peor cuando llega el momento del cambio.
¿Cambio en dólares? ¡Olvídalo! En Cuba te devuelven el vuelto en caramelitos, galleticas dulces y otros inventos azucarados. Y así fue: en vez de regresar a su casa con carne para alimentar a su familia, volvió con un par de “chupa chups” y la frustración a flor de piel.
Lo más triste es que esta historia no es única. Es el pan de cada día (sin pan) en las tiendas MLC de la isla, donde ni siquiera pagando en divisas se garantiza el acceso a alimentos básicos. Y mientras tanto, la propaganda oficial sigue hablando de “resistencia creativa”.