Cuando se trata de revolver las redes con un cucharón en la mano, La Cintumbare sabe cómo hacerlo. Esta influencer cubana, que ya es conocida por sus ocurrencias y recetas sabrosas, volvió a prender fuego a las redes —esta vez, literalmente— con un ajiaco cargado de viandas y pollo que dejó a más de uno con la boca abierta (y a otros, echando humo).
La Cintumbare tiene una sección muy querida por sus seguidores: sus videos cocinando. Entre risas, cuentos y aliños, ella convierte cualquier receta en un show criollo. Esta vez, decidió preparar un buen ajiaco porque, como ella misma dice: “Bandida retirada que se respete tiene que complacer a su esposo con un ajiaco bien rico”. Y sí, parece que lo complació… ¡y de paso le tocó las fibras a medio internet!
El caldero estaba tan lleno de pollo, malanga, boniato y condimentos, que parecía una olla mágica. En medio de la cocción, cerveza en mano, soltó una frase que terminó siendo la chispa del debate: “Mira cómo está aquello, una cantidad de pollo que para qué explicarte. Después dicen que en Cuba no hay comida”. Y con eso, el ajiaco se convirtió en tema nacional.
Como buena cubana que es, no faltó el momento cómico: agarró una toalla nueva y sin pensarlo dos veces, la picó para hacerla trapo de cocina. La señora que trabaja con ella se quedó en shock, pero ella lo dejó claro: “Bandida retirada y cubana que se respete tiene que picar una toalla, un pulóver, cualquier cosa porque si no tú no eres cubana”. Así, sin filtro.
El video se llenó de comentarios de todo tipo. Muchos lo aplaudieron:
“Qué rico oye al fin el video cocinando ya lo extrañábamos”,
“El amor entra por la cocina”,
“Me encantan estos videos de cocina”.
Pero otros le cayeron arriba con todo:
“Eso es burlarse del cubano de a pie”,
“En Cuba hay comida, pero no para todos los bolsillos”,
“Eso es una falta de respeto decir que en Cuba sí hay comida”.
Y como era de esperarse, algunos no se aguantaron: “Si tienes tanta comida, compártela con los que no tienen”. Claro, no olvidemos que hace unas semanas, después de otra ola de críticas, La Cintumbare respondió sin pelos en la lengua: “Yo no soy el Papa para andar regalando comida”.
Lo cierto es que más allá del sazón y la broma, el video abrió un debate real sobre la desigualdad en Cuba. Porque sí, puede que alguien tenga cómo preparar un ajiaco de lujo… pero eso no borra el hecho de que muchos otros apenas tienen qué echarle al plato. Y ahí es donde está la herida.