Una simple fiesta entre cubanos terminó armando tremendo lío en redes… y no fue por la música, fue por el escándalo que se armó después. El video lo compartió la cuenta de Instagram Cubanerísimo, y muestra lo que parecía una típica noche de vacilón criollo: gente conversando a voz en cuello, música sonando duro y una bocina bien encendida… ¿el problema? Que no estaban en La Habana, sino en algún rincón de Estados Unidos —posiblemente Houston o Hialeah, según dicen los comentarios.
La escena no tiene mucho misterio: unas seis personas en el pasillo de un edificio, en el segundo piso, pasándola bien, riendo y conversando como si estuvieran en la sala de su casa. Lo que sí llamó la atención (y generó indignación) fue que todo esto ocurrió pasada la medianoche, con la música reventando y sin mucho cuidado por el descanso ajeno.
En los comentarios no faltaron los que se quejaron. Gente molesta por lo que consideran una falta de respeto al país que los acoge. Una usuaria, yanelys2510, dijo bien claro: “Esto no es Cuba, aquí hay leyes y reglas que respetar”. Y no fue la única con esa opinión.
Pero ahí no terminó el drama. Algunos usuarios sacaron a relucir las leyes locales y aclararon que, aunque mucha gente cree que solo se prohíbe la música alta después de cierta hora, en Florida el ruido excesivo está mal a cualquier hora, porque hay personas que duermen de día y trabajan de noche.
Eso sí, el comentario que realmente puso la cosa caliente fue el de alguien que sugirió llamar no a la policía, sino ¡al ICE! Sí, al mismísimo Servicio de Inmigración y Control de Aduanas. Ese comentario dividió a los internautas: para unos fue exagerado y malintencionado; para otros, una opción “efectiva” para acabar con la bulla. Un debate que escaló rápido, entre la indignación y la xenofobia.
La verdad es que las leyes sobre ruido en Florida son bastante claras. Por ejemplo, en Tampa (condado Hillsborough), no puedes pasarte de los 55 decibelios entre las 10 p.m. y las 7 a.m. En Miami-Dade, si tu música se escucha a más de 100 pies de distancia durante la noche, estás violando la ley. En Fort Lauderdale, el sonido no debe cruzar más de 25 pies desde tu propiedad después de las 10 p.m.
Y sí, las autoridades pueden actuar si alguien reporta el exceso: pueden poner multas, hacer advertencias o hasta confiscar el equipo si el comportamiento se repite.
Al final, esto no va solo de música ni de fiesta, va de convivir con respeto en otro país, donde las normas son diferentes. Y aunque el alma cubana es fiestera por naturaleza, toca ajustar el volumen si queremos vivir sin problemas con los vecinos… y con la ley.
