En medio del ajetreo habanero, entre bocinazos, calor y gente corriendo de aquí pa’ allá, hay historias que brillan como faroles en plena oscuridad. Así es la de Yuniel, un muchachito de apenas 15 años que, con toda la entereza del mundo, limpia parabrisas en el municipio 10 de Octubre, en La Habana.
Pero ojo, este no es solo “otro niño en la calle”. Yuniel sigue yendo a la escuela, ayuda a los viejitos de su cuadra a cargar agua, y nunca ha dejado de echar pa’lante con decencia, a pesar de las miles de trabas que tiene encima.
Y fue justo eso lo que tocó el corazón de una pareja de cubanos, que al enterarse de su historia decidieron hacer algo más que compartir un post. Le regalaron una bicicleta nueva, flamante, con amortiguadores y todo. ¡De paquete!
🎥 El momento que derritió las redes
El instante fue compartido en Facebook por Guillermo Rodríguez Sánchez, quien subió un video que te pone el pecho apretado. En él se ve a Yuniel recibiendo su bici, una bolsa con confituras, ropa, zapatos y hasta 18 mil pesos cortesía de una usuaria que se hace llamar “Tía Tetas”, conocida por su gran corazón y su constante apoyo a causas sociales.
«Gracias a Harvyn, el chamaco que sale hablando en el video, porque fue él quien nos conectó con el niño. Cuando escuchó que estaba ahorrando para una bici, nos activamos», contó Guillermo en su publicación.
👩👦La mamá, la escuela y el semáforo
Según confirmó Guillermo, la madre de Yuniel está enterada de todo y, al ver el apoyo que recibió su hijo, prometió que no lo dejará volver al semáforo, ese cruce peligroso donde lo veían con el pomo en la mano, limpiando vidrios por unas monedas.
Yuniel, emocionado hasta los tuétanos, no cabía en sí de la felicidad. “¡Está nueva nueva… con amortiguador y todo!”, dijo mientras le daba candela a los pedales, estrenando su tesoro.
✊ El valor de ganarse la vida sin robar
Más allá del gesto, esta historia pone sobre la mesa una verdad incómoda: en Cuba hay niños que prefieren ganarse la vida honradamente antes que caer en la delincuencia. Y eso no debería ser la excepción, sino la regla.
“El chamaco quiere trabajar, tiene 15 años y se busca la vida decentemente, algo que muchos adultos ni se plantean”, escribió Guillermo. «Vamos a ver si le conseguimos una pinchita, algo que lo saque de la calle. No es lo ideal, pero ya sabemos cómo está la cosa», agregó.
📢 Un rayito de esperanza en una isla golpeada
La historia se volvió viral en redes sociales y fue celebrada como un respiro en medio del agobio diario que viven tantos menores en la isla.
La activista Lara Crofs fue directa al grano:
“Vivimos en un país donde los niños son condenados al abandono. Los ves vendiendo caramelos, limpiando parabrisas, pidiendo limosna mientras los turistas los miran como parte del paisaje”.
Pero ella misma cerró con un rayo de luz:
“Hoy, uno de esos niños sintió algo distinto. Hoy se subió a una bicicleta. Y quizás, si seguimos sumando manos, mañana otro niño también lo logre”.