Otra jornada a oscuras y con calor infernal. Así amaneció Cuba este miércoles, arrastrando apagones masivos que afectan a casi todo el país. El motivo ya es un viejo conocido: una crisis eléctrica crítica que no da tregua, y que parece empeorar con cada parte oficial.
Según la Unión Eléctrica (UNE), el Sistema Eléctrico Nacional (SEN) amaneció con una disponibilidad de apenas 1.730 megawatts (MW), frente a una demanda que superó los 3.100 MW. Resultado: más de 1.400 MW en afectaciones y miles de cubanos sin luz, sin agua y sin aire.
La pesadilla sigue y puede empeorar
Y como si no fuera suficiente, el pronóstico para lo que resta del día es todavía más desalentador. Se espera que el déficit llegue a 1.840 MW en la noche, justo en el horario pico, con apagones que podrían alcanzar casi los 2.000 MW en todo el territorio nacional.
En otras palabras: el país entero podría estar sin corriente esta noche, o con apagones intermitentes que vuelven loco al más paciente.
La Habana, por bloques: aquí no se salva nadie
En la capital, la Empresa Eléctrica de La Habana detalló que el martes la afectación fue de 117 MW, pero hoy se aplicarán apagones rotativos desde las 10:00 a.m. hasta el amanecer del jueves. El suministro dependerá de cuánto aguante el SEN… y por ahora, no aguanta nada.
Las plantas: rotas, sin mantenimiento y sin combustible
El sistema eléctrico está al borde del colapso total. La CTE Antonio Guiteras, en Matanzas, volvió a salirse de circulación por una avería en su caldera. La planta, que fue inaugurada en 1989, lleva más de tres décadas sin un mantenimiento capital.
En julio nada más ha sufrido tres roturas importantes, lo que evidencia el desgaste extremo de una infraestructura que no da más. A esto se suman problemas en Energas Varadero, Renté y Felton, además del mantenimiento en Santa Cruz y Carlos Manuel de Céspedes.
Por si fuera poco, 94 centrales de generación distribuida están fuera de servicio por falta de combustible, y otros 305 MW están caídos por limitaciones térmicas.
Indignación creciente: la gente está que explota
Las redes sociales están que arden. Los apagones han generado una ola de malestar en toda la isla. Desde pérdidas de alimentos hasta noches en vela por el calor, los cubanos están al límite.
“Que renuncien y entreguen el país, cualquiera lo saca adelante menos ellos”, escribió un usuario molesto. Otros denunciaron más de 36 horas sin corriente en varias zonas, mientras que en provincias como Matanzas y Cienfuegos, los cortes superan las 20 horas diarias.
Niños sudando en los portales, ancianos sin ventilación y barrios enteros sin agua, es el panorama en muchas regiones. Lo que se vive hoy en Cuba no es solo una crisis energética: es una emergencia social.