¡Kenny Robert lo volvió a hacer! Y sí, cuando decimos lo volvió a hacer, nos referimos a esa combinación explosiva de humor, parodia y sarcasmo con la que acostumbra a sacudir las redes. Esta vez, su blanco fue, otra vez, Rachel Arderi, la modelo e influencer que no puede postear nada sin que Kenny, o mejor dicho, su personaje Jéssica, le tire su respectiva pullita con clase… y mucha comedia.
Todo empezó hace unos días, cuando Rachel —la siempre polémica pareja del reguetonero Oniel Bebeshito— subió un video bastante sensual, cubriéndose apenas con unas sábanas blancas, en una pose que pretendía derretir las redes. Y lo logró… pero no precisamente por el motivo que esperaba. Porque a Kenny le bastaron un par de horas y una sábana vieja para montar su versión deluxe de la escena, y el resultado fue pura dinamita humorística.
Jéssica, el alter ego de Kenny, apareció en pantalla con las mismas intenciones sensuales (o algo parecido), pero con poses llevadas al extremo, miradas dramáticas, y un manejo de la sábana que debería tener su propio tutorial de YouTube. La sátira fue tan exagerada como efectiva, y los seguidores del comediante no pararon de reír. Algunos incluso confesaron que ya ni siguen a Rachel, solo esperan a que Kenny saque el remix cómico para enterarse de todo.
Mientras Arderi apostó por el erotismo sutil y las luces suaves, Kenny decidió usar el estudio casero con cortinas volando, filtros mal puestos y su toque inconfundible. Y eso fue justo lo que encantó a su público. “Tu video me gustó más”, “Las sábanas de atrás me hicieron el día” o “Yo sabía que este video venía”, fueron solo algunos de los comentarios que inundaron su publicación. ¡El público sabe!
Y por si no lo sabías, la cosa entre Kenny y Rachel no es nueva. Hubo amistad, luego pelea pública, y desde entonces, cada post provocador de Rachel parece una invitación a que Jéssica entre en acción. Porque no es la primera vez que Kenny la parodia, ni será la última.
Algunos piensan que lo suyo es solo humor sano. Otros, que hay algo de ajuste de cuentas digital disfrazado de risa. Sea como sea, lo cierto es que Kenny Robert ha convertido la burla fina en arte, y Rachel… bueno, Rachel le sigue dando material.
