Un grave accidente de tránsito sacudió este sábado la zona del entronque de Fontanar, en La Habana, donde un motorista terminó con heridas severas que estremecieron a quienes presenciaron la escena.
Las imágenes del siniestro circularon en el grupo de Facebook Accidentes de Buses y Camiones, compartidas por el usuario Yasmany Morales, quien contó que la víctima perdió un pie tras ser embestida por un vehículo, presuntamente conducido por un botero. “Le arrancó el pie del tobillo para abajo”, relató en su publicación, dejando claro lo brutal del impacto.
Aunque algunos le reclamaron no mostrar el accidente con más detalle, Morales explicó que decidió no hacerlo por respeto a la dignidad del herido. Lo cierto es que la tragedia volvió a poner sobre la mesa un problema viejo en Cuba: la imprudencia en las calles.
Los llamados boteros, choferes particulares que recorren rutas fijas, llevan tiempo bajo la lupa por su forma de manejar. La competencia feroz por pasajeros los empuja a exceder límites de velocidad y a tomar riesgos innecesarios en una ciudad donde las vías, además, están en pésimas condiciones por culpa de la desidia del régimen. El resultado son accidentes que, como este, dejan familias destrozadas.
Hasta ahora no existe un parte oficial sobre el estado de salud del motorista ni sobre el conductor implicado, algo que no sorprende, pues el gobierno suele ocultar o maquillar este tipo de tragedias para no reconocer el caos vial que vive la isla.
Vale recordar que apenas la semana pasada otro motorista terminó herido en El Vedado, en la intersección de Paseo y Calzada, tras ser impactado por una camioneta. Fue llevado de urgencia al hospital con golpes en la cabeza. Estos episodios se repiten con una frecuencia alarmante y dejan claro que las calles de Cuba son un peligro constante, donde la vida de los ciudadanos se juega entre el abandono estatal y la imprudencia diaria.
