El litoral de Gibara, Holguín, amaneció este lunes con un mar bravucón: olas de más de metro y medio golpeando la costa norte oriental de Cuba, como consecuencia del mar de leva que dejó a su paso el huracán Erin en el Atlántico.
La información salió a la luz en el grupo de Facebook “MeteoCanal”, donde Norge Augusto Gallardo Quesada compartió imágenes del fuerte oleaje que azotaba la zona. En las fotos se aprecia claramente el fenómeno conocido como “mar de leva” o “mar de fondo”, muy común en la isla cuando un ciclón tropical transita, aunque sea a distancia, por aguas del Atlántico.
Según explicó Gallardo, las marejadas alcanzaban más de 1,5 metros de altura, por lo que recomendó a los vecinos extremar precauciones y evitar actividades náuticas hasta que el mar se calme.
El peligro no está solo en la navegación: cualquiera que se acerque demasiado a la costa baja puede ponerse en riesgo, pues este tipo de oleaje suele provocar inundaciones repentinas. De hecho, el medio oficialista Gibaravisión confirmó en redes sociales que en la zona de Güirito ya se registraban penetraciones del mar.
Mientras tanto, los meteorólogos también tienen la vista puesta en otra amenaza: una nueva onda tropical en el Atlántico oriental que podría evolucionar en los próximos días. Aunque por ahora solo es un sistema desorganizado de lluvias y tormentas, el Centro Nacional de Huracanes (NHC) advierte que hacia el fin de semana las condiciones podrían volverse más favorables para su desarrollo.
El sistema avanza al oeste-noroeste a unos 32 km/h y tiene ya un 50% de probabilidades de convertirse en ciclón tropical en los próximos siete días, según el último parte del NHC.