La cúpula gobernante de Cuba volvió a encender su discurso antiimperialista tras denunciar la presencia de buques de guerra estadounidenses en aguas del Caribe, calificándola de “amenaza directa a la paz regional”, aunque la realidad apunta a un movimiento estratégico contra el narcotráfico y la red criminal que sostiene a sus aliados en Venezuela.
En un intento por desviar la atención de la crisis interna y proyectar una imagen de fortaleza, altos dirigentes de La Habana acusaron a Washington de “promover una escalada militar con fines intervencionistas”, apuntando directamente al senador Marco Rubio como pieza clave de la supuesta maniobra.
Bruno Rodríguez dramatiza el escenario
El canciller Bruno Rodríguez Parrilla acudió a su cuenta en X para lanzar la ya repetida narrativa de agresión estadounidense, alegando que el despliegue naval constituye un “grave peligro para la paz regional” y que busca imponer una “dominación” sobre América Latina.
Según sus palabras, el operativo se ampara en un “ridículo pretexto” de combate al narcotráfico y responde a la agenda de “políticos corruptos”, en clara referencia a Rubio, aunque sin mencionarlo directamente.
Morales Ojeda y la eterna defensa del chavismo
Por su parte, Roberto Morales Ojeda, segundo al mando del Partido Comunista, no perdió la oportunidad de reafirmar el apoyo del régimen cubano al gobierno de Nicolás Maduro, asegurando que “ninguna amenaza del imperialismo yanqui podrá doblegar” al pueblo venezolano.
El dirigente calificó la situación como una “ofensiva ideológica de la extrema derecha”, acusando a Washington de impulsar un pensamiento “fascista” en la región, en un intento de blindar políticamente a un Maduro cada vez más aislado.
Washington se planta firme
Mientras La Habana y Caracas agitan sus discursos, el Pentágono mantiene que el despliegue —que incluye destructores, un submarino nuclear y un crucero lanzamisiles— busca frenar el tráfico de drogas y evitar que Venezuela se convierta en un “santuario criminal”.
Marco Rubio lo dejó claro en una reunión del gabinete de la Casa Blanca: Estados Unidos está “a la ofensiva” contra los carteles que bombean veneno mortal hacia nuestras ciudades. Además, la recompensa por Nicolás Maduro se ha duplicado, bajo la acusación de encabezar el llamado Cártel de los Soles.