En la tarde del pasado sábado, una tormenta local severa golpeó la ciudad de Bayamo con tanta fuerza que tumbó ramas, árboles y hasta postes eléctricos, dejando varias zonas bajo agua, como la Plaza de la Patria y el mercado agropecuario del reparto Jesús Menéndez.
Las mayores afectaciones se concentraron cerca de la sede de Artex, en la avenida Antonio Maceo, según publicó el periódico oficialista La Demajagua. Pero más allá del reporte institucional, las imágenes en redes sociales dejan claro que la ciudad quedó patas arriba.
Un sistema que reacciona tarde y con pocos recursos
Fuerzas del Cuerpo de Bomberos, técnicos de Etecsa y de la Empresa Eléctrica corrieron a reparar los daños, mientras el vicegobernador José Luis Vega Pérez y la jefatura del Poder Popular “dirigían” las acciones de recuperación. Pero la realidad es que la respuesta fue más improvisada que organizada, con vecinos sumándose a cortar árboles y recoger escombros porque saben que si esperan por el Estado, la cosa demora días.
La usuaria Yanelkys Llera Céspedes compartió en Facebook fotos de lo ocurrido y comentó que la corriente se fue minutos antes de que cayeran los postes eléctricos. “Si eso hubiera pasado con la luz conectada, no quiero ni imaginar la desgracia”, escribió.
Otro golpe para un país en crisis
La Empresa Eléctrica de Granma confirmó que cuadrillas de linieros seguían trabajando para restablecer el servicio. Sin embargo, este episodio no es aislado: en las últimas semanas, tormentas, fuertes vientos y lluvias han causado estragos en varias provincias.
Lo grave es que Cuba enfrenta estos fenómenos extremos sin recursos suficientes, con redes eléctricas viejas, techos en mal estado y un alcantarillado colapsado, como denuncian vecinos de La Habana, donde basta una llovizna para inundar calles enteras.
En Maisí, Guantánamo, otro evento meteorológico reciente tumbó árboles, dañó cultivos y levantó techos. En Santa Clara, Villa Clara, rachas de más de 100 km/h pusieron a la población en alerta. Todo esto en apenas días.
Pronóstico nada alentador
El meteorólogo Raydel Ruisánchez advirtió que dos vaguadas —una sobre el sudeste del Golfo de México y otra cerca del oriente del país— seguirán generando condiciones de inestabilidad, con lluvias, chubascos y tormentas eléctricas en gran parte de la isla.
Mientras tanto, el régimen sigue sin invertir en infraestructura y prefiere maquillar la crisis con notas oficiales. Pero los cubanos saben que una tormenta de unas horas basta para dejar en evidencia décadas de abandono y desidia estatal.