Una cubana volvió a poner sobre la mesa la triste realidad del país al mostrar en TikTok cómo, en pleno 2025, tiene que cocinar con carbón porque en su casa no hay gas. Su testimonio es un reflejo de la crisis doméstica que ahoga a miles de familias bajo el desastre del castrismo.
“Buenos días con alegría… aunque para los cubanos nunca hay un día alegre”, comienza diciendo la usuaria @sarasleybi.alfons en un video publicado el 22 de agosto. Entre resignación y humor negro, cuenta que quiso hacer café por la mañana y descubrió que no había gas en la casa. “Mi mamá me lo había dicho ayer y se me olvidó, como vivimos tan agitados a mí se me pasó”, confiesa.
La solución fue prender una hornilla improvisada con carbón. “Ya saben, tocó carbón, volvimos a lo mismo, a la era del carbón”, lamenta mientras muestra cómo prepara arroz amarillo con plátano burro y una lata de conserva para “estirar” la comida.
Inventar para sobrevivir
En el video, la cubana enseña cómo ha tenido que sembrar plátanos en el patio y reciclar utensilios para poder cocinar sobre las brasas. “Aquí estoy yo, haciendo mi arte culinario arriba del carbón”, dice con una mezcla de orgullo y cansancio. Y luego suelta una frase que resume la vida en la isla: “El cubano es una calamidad tras otra, porque el tema nunca cambia”.
El clip generó cientos de comentarios. Muchos la llamaron “guerrera” y “admirable”, mientras otros le desearon bendiciones por su capacidad de “resolver” en medio del desastre. Una seguidora incluso le comentó: “Aquí interactuando para que otra mami cubana gane dinerito con TikTok para ella y su familia”.
El reflejo de un país en ruinas
Lo que vive esta mujer no es un caso aislado. La crisis energética en Cuba mantiene a la población entre apagones interminables y carencias de todo tipo. El sistema eléctrico arrastra un déficit superior a los 1,800 megawatts y provincias como La Habana sufren cortes de hasta 10 horas seguidas, mientras termoeléctricas averiadas llevan años sin producir ni un kilowatt.
La Empresa Eléctrica incluso ha llegado a pedir a la gente que “no conecte todos los equipos cuando regrese la luz”, culpando al pueblo del deterioro de un sistema obsoleto. Un insulto más para quienes viven bajo apagones eternos, intentando cocinar, estudiar o dormir como se pueda.
Entre el carbón, la leña y el humo
La escasez ha llevado a que muchas familias vuelvan a talar árboles para cocinar con leña, desatando además un problema ambiental. El precio del carbón está por las nubes y, para quienes no pueden pagarlo, la única opción es improvisar fogones de madera.
En redes circulan testimonios similares: madres que tienen que encender la leña de madrugada cuando sus hijos les piden leche, lidiando con el humo y el hollín que lo impregna todo. Historias que recuerdan al Período Especial, como relató una madre de Camagüey, donde su hijo hace las tareas a la luz de una lamparita recargable, igual que ella lo hacía de niña.
