La empresa estatal de telecomunicaciones ETECSA en Mayabeque volvió a dar de qué hablar este fin de semana, no precisamente por mejorar la pésima conexión ni por bajar sus abusivos precios, sino por presumir en redes sociales la participación de sus trabajadores en un ejercicio militar improvisado para “defender la Patria”.
En su página de Facebook, la División Territorial de la compañía aseguró que “todos tenemos el compromiso de prepararnos para la defensa”. Pero lo que debía ser una muestra de disciplina terminó convertido en blanco de burlas y memes, porque las imágenes difundidas dejaron al descubierto más ridículo que poderío.
Las fotos mostraban a empleadas en plena práctica de tiro, algunas vestidas con ropa de oficina y hasta con zapatos de tacón. En lugar de proyectar seguridad, la escena se interpretó como un reflejo de la decadencia que vive el país y de lo desconectada que está la élite de lo que de verdad necesita la gente.
En los comentarios, los cubanos no perdieron tiempo en pasarle la cuenta a la empresa. Una internauta resumió la indignación con ironía: “Aquí están los efectos de los apagones, la hambruna, la miseria y los precios de ETECSA. Vergüenza ajena, son un chiste de mal gusto”. Otro agregó con mordacidad: “De lo que sí estoy seguro es que ustedes sí tienen puntería, porque cuando disparan los precios matan al pueblo de a pie”.
Mientras tanto, las quejas siguieron subiendo de tono: “A defender la Patria del ejército de dirigentes barrigones”, escribió un cubano, mientras otro señaló que “la conexión está tan mala porque ustedes se entretienen con estas ridiculeces”. La indignación virtual se convirtió en un reflejo del cansancio real de la gente, que en medio de apagones y hambre ve cómo la dictadura sigue jugando a la guerra.
Este tipo de actividades forman parte de la llamada “Guerra de Todo el Pueblo”, una estrategia militar creada en los años 80 que el régimen insiste en mantener viva, aun cuando el país se hunde en apagones, escasez y desesperanza. La propaganda oficial la presenta como símbolo de unidad nacional, pero en la práctica lo que se muestra son fusiles oxidados, uniformes parchados y trabajadores sin preparación, convertidos en actores de un teatro barato para complacer a la cúpula.
El llamado Día de la Defensa coincidió con una jornada marcada por apagones prolongados, colas interminables y protestas en varias provincias. Así, la puesta en escena de ETECSA terminó confirmando lo que la mayoría de los cubanos ya sabe: el régimen prefiere distraer con paripés militares antes que resolver los problemas reales que hunden a la isla.
