Si pensabas que al llegar a un hotel lo único que te esperaba era una sonrisa en recepción, un cóctel de bienvenida y la llave de tu habitación… ¡piénsalo dos veces! Porque en el hotel Elguea, en Villa Clara, la bienvenida parece más bien una reunión de trabajo, o peor aún, un mitin revolucionario.
Todo comenzó cuando el perfil de Facebook Los Aventureros y La Bestia compartió un video que se volvió viral en cuestión de horas. En las imágenes, se ve cómo los huéspedes son recibidos con una “orientación” tan extensa que muchos se sintieron en medio de una asamblea política más que en un destino turístico.
El protagonista del video es un trabajador del hotel, que con toda la seriedad del mundo, explica a los recién llegados cómo funciona el alojamiento. Y ojo, no es un simple “el desayuno es de 7 a 10”. ¡Nada de eso! El hombre se despachó con un discurso que incluía detalles minuciosos sobre el menú, el sistema de pedidos y hasta advertencias sobre qué agua tomar y cuál evitar.
Entre las perlas de la bienvenida, soltó frases como: “Tenemos pescado, picadillo, cerdo… Yo tengo un sistema montado que es cuando desayunen en la mañana, ustedes le preguntan a la muchacha qué tenemos para el almuerzo…”. Todo en un tono tan formal que parecía más un secretario de asamblea que un recepcionista.
Por supuesto, el detalle del agua no podía faltar: “El agua de las llaves no es aconsejable tomarla, pero en el restaurante y en el bar tienen agua embotellada”. Una orientación práctica, sí, pero que al final terminó dividiendo opiniones.
Y es que lo que más llamó la atención no fue la lista de platos o la advertencia sobre el agua potable, sino la forma en que todo se comunicó. Para muchos, esa bienvenida fue un flashback a los mítines políticos de toda la vida en Cuba. “Parece un mitin revolucionario”, comentó un internauta, mientras otros lo calificaron de “patético” y “exceso de formalismo”.
Pero no todos lo vieron mal. Algunos defendieron la práctica y aseguraron que era simplemente una diferencia cultural. “Este hotel no es todo incluido, es otro estilo”, escribió una usuaria. Incluso hubo comentarios nostálgicos, como el de un visitante habitual que recordaba con cariño los baños termales y la piscina del lugar.
Eso sí, lo que tampoco pasó desapercibido fue el precio. Según compartieron Los Aventureros en otro video, un paquete de tres noches y cuatro días cuesta poco más de 4,000 pesos cubanos (unos 1,600 por noche), incluyendo el desayuno pero sin transporte.
Al final, lo que debía ser una simple bienvenida turística terminó abriendo un debate mucho más profundo: ¿es necesario tanto formalismo para unas vacaciones? ¿O acaso en Cuba hasta el descanso viene acompañado de normas, discursos y recordatorios que recuerdan a las reuniones políticas? Lo cierto es que el video puso sobre la mesa un tema que muchos cubanos conocen de sobra: en la isla, hasta relajarse puede convertirse en un acto lleno de protocolos.