Un cubano del éxodo del Mariel se volvió viral en redes sociales después de contar su amarga experiencia con el comunismo y explicar por qué, después de 45 años en Estados Unidos, no ha puesto un pie de nuevo en la isla.
El protagonista de esta historia se llama Carlitos, un trabajador de mantenimiento en un aeropuerto de Miami, que compartió su testimonio en un video publicado por la usuaria de TikTok @lariquisima7. Con voz firme y clara, el hombre relató los motivos que lo hicieron abandonar Cuba en 1980 durante el histórico éxodo del Mariel.
“No, no soy comunista. Yo conocí el comunismo y tuve una amarga experiencia del comunismo. Llevo 45 años fuera”, afirmó Carlitos en el video. Además, aclaró que nunca ha regresado a la isla: “¿A buscar qué? Aquí tengo a mi familia y a mis sobrinos. Yo soy sin patria, pero sin amo. Patria y vida”, concluyó, dejando claro que valora por encima de todo la libertad que encontró lejos de Cuba.
Según la compañera que compartió el video, Carlitos sufrió persecución política desde muy joven. Fue expulsado de escuelas y centros laborales en la isla simplemente por expresar su postura, hasta que decidió escapar por el Mariel. Desde entonces, ha construido su vida en Estados Unidos, siempre recordando su pasado y los sacrificios que implicó emigrar.
“Carlitos es un compañero de trabajo que sufrió mucho a causa del comunismo. Lo botaron de la escuela y de los trabajos hasta que decidió venir por el Mariel. Aquí lleva 45 años sin regresar y explica que él es sin patria pero sin amo. ¡Abajo el comunismo! ¡Patria y vida!”, escribió la usuaria en la descripción del video, destacando el carácter resiliente del cubano.
El video ha generado un torrente de reacciones en TikTok, donde muchos usuarios lo han aplaudido como un ejemplo de la generación de cubanos que dejó la isla buscando libertad y oportunidades. Entre los comentarios destacan mensajes de apoyo, empatía y admiración por la valentía de Carlitos al compartir su experiencia y mantener viva la memoria del éxodo del Mariel.
Más allá de su testimonio personal, la historia de Carlitos refleja la realidad de miles de cubanos que, tras dejar la isla, nunca pudieron regresar por miedo, desencanto o experiencias negativas con el régimen. Su mensaje de “Patria y vida” se ha convertido en un símbolo de resistencia, libertad y orgullo por quienes eligieron vivir sin renunciar a su dignidad.
Para muchos jóvenes cubanos y migrantes en la diáspora, Carlitos representa la voz de quienes conocieron el comunismo de cerca y aprendieron que la libertad no tiene precio. Su historia sigue siendo compartida en redes, inspirando a nuevas generaciones a valorar lo que significa vivir sin miedo y con autonomía sobre sus vidas.