Un cubano se volvió protagonista involuntario de un video viral en TikTok después de ser arrestado en una tienda de Walmart en Cape Coral, Florida, por intentar llevarse un par de zapatos sin pagarlos. El clip muestra la mezcla de nerviosismo, disculpas y justificaciones del detenido, que rápidamente captó la atención de los usuarios en redes sociales.
En el video, compartido por la cuenta @lanoticiadehoy, se ve al hombre intentando explicar su situación mientras un oficial de policía le pregunta por qué decidió cometer el robo. Al parecer, el cubano apenas habla inglés y necesitó la ayuda de un intérprete para comunicarse con las autoridades.
El hombre trató de justificar su acción relatando problemas personales: “Mire, yo no tengo trabajo, tengo una cirugía en la mano y otra en el pie. No tenía dinero, pero no lo vuelvo a hacer. Solo cogí los zapatos. Nunca había venido a esta tienda”, dijo, con evidente angustia.
A medida que la conversación avanzaba, el cubano admitió que se había llevado los zapatos, pero intentó mostrar buena voluntad ofreciendo pagarlos en el momento: “Sí, me los llevé pero no lo vuelvo a hacer. Mira, solo valen 40 dólares, y yo tengo 40 dólares aquí. Voy, los pago y hasta dejo los zapatos. No me interesan los zapatos. Lo siento mucho. Esto no lo vuelvo a hacer más nunca en mi vida. Perdóname, discúlpame”, insistió.
A pesar de su disposición y súplicas, las autoridades decidieron detenerlo al salir de la tienda. La escena rápidamente se convirtió en tema de debate entre los usuarios de TikTok, quienes compartieron opiniones divididas sobre el caso.
Algunos criticaron al cubano por tener dinero en el bolsillo y aun así decidir robar: “Si tenías el dinero, ¿para qué arriesgarte?”, comentó un usuario. Otros, sin embargo, señalaron que el incidente refleja la presión y las dificultades que enfrentan muchos inmigrantes, aunque resaltaron que eso nunca justifica infringir la ley.
Casos como este abren la conversación sobre la importancia de respetar las normas en un país extranjero, independientemente de las circunstancias personales. También evidencian cómo las redes sociales pueden viralizar situaciones que, de otra forma, pasarían desapercibidas, transformando un simple robo en un debate público sobre moralidad, empatía y responsabilidad.
Al final, lo que queda es la mezcla de frustración y lección: un hombre cubano atrapado entre la necesidad y la ilegalidad, una historia que recuerda a todos que las decisiones impulsivas pueden tener consecuencias inmediatas, incluso cuando uno está dispuesto a corregir el error.
