Una cubana radicada en Estados Unidos, conocida en TikTok como @tu_viaje_con_rosy, se ha robado el corazón de miles de usuarios en redes sociales tras compartir un video donde aparece repartiendo juguetes a niños del barrio Cayo Hueso, en pleno Centro Habana. Un gesto sencillo, pero cargado de amor y empatía, que ha conmovido a quienes aún creen en la solidaridad más allá de la miseria que impone el sistema cubano.
“Estoy en Cuba y hoy quiero regalarle juguetes a algunos niños que me vaya encontrando por la calle”, contó Rosy con una sonrisa. “Ya estuve en Varadero, pero esto lo tenía en mente desde que organicé el viaje”. Dicho y hecho: viajó con cuatro maletas llenas de juguetes, mochilas, útiles escolares, mantas y detalles para bebés, repartiendo cada obsequio según la edad y el sexo de los pequeños.
Rosy admitió que al principio temía que se le aglomerara la gente, como ha pasado en otros videos virales, pero la realidad la sorprendió. “Hubo quienes no me aceptaron los regalos porque ya recibían ayuda del extranjero y querían que se los diera a otros niños. Eso me pareció precioso”, relató. Un detalle que refleja la nobleza del pueblo, aun en medio de tanta carencia provocada por un régimen que lleva décadas destruyendo la esperanza.
En un inicio pensó en entregar los juguetes por medio de una iglesia, pero decidió hacerlo por su cuenta. “Así me aseguro de que lleguen a quienes de verdad los necesitan”, explicó. Además, quiso que sus hijos participaran, para que vieran con sus propios ojos la dura realidad de Cuba y entendieran lo que significa crecer sin un simple juguete.
El video está lleno de momentos que conmueven hasta al más duro: niños sonriendo con los ojos brillantes, madres agradecidas, y un ambiente de cariño genuino que contrasta con la desolación de los edificios en ruinas y las calles olvidadas. “No saben la alegría que sentí al ver esas caritas felices”, escribió Rosy emocionada. “Las mamitas estaban súper contentas, y no hay nada más lindo que ver sonreír a un niño”.
Los comentarios se llenaron de bendiciones y mensajes de admiración. “Dios te bendiga, muchacha”, le escribió una seguidora. Otra añadió: “Muy lindo gesto, yo también lo hice cuando fui a Cuba, y ver esas caritas de felicidad me llenó el alma”. Rosy respondió con humildad: “Las mamitas no sabían cómo agradecer, se me apretó el alma”.
La tiktokera contó que pudo costear los juguetes gracias a las ganancias obtenidas en TikTok Shop, y sueña con repetir la experiencia. “Ojalá pudiera hacerlo otra vez”, dijo. En la descripción del video dejó una frase que resume todo: “De todo lo que hice en Cuba, esto fue lo mejor: ver la carita de los niños al recibir regalos”.
